Durante los días 21 y 22 de mayo, y en el marco del proyecto europeo HUMUS, la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (AGAPA) organizó en las Oficinas Comarcales Agrarias de Baza y Órgiva dos eventos orientados a diagnosticar la salud del suelo con los agentes del territorio. 

 

En el primer evento, participaron 21 personas pertenecientes a asociaciones y cooperativas de agricultores y ganaderos, la Red Agroecológica de Granada, el Centro IFAPA Camino de Purchil, la Universidad de Granada, el Grupo de Desarrollo Rural (GDR) Altiplano de Granada, las Mancomunidades de Huéscar y Baza y Ayuntamientos de la comarca. A la reunión de Órgiva asistieron 16 personas entre los que se encontraban ganaderos, asesores, trabajadores de empresas de turismo activo, representantes del Parque Nacional de Sierra Nevada, AMAYA, GDR Alpujarra,  Ayuntamientos, y las Universidades de Córdoba y Granada. 

 

En el caso del Altiplano, se señalaron como actuaciones necesarias para evitar prácticas agrícolas que están provocando erosión en el suelo: controlar la presión que sufren las vegas por las urbanizaciones, la competencia por otros usos como plantas fotovoltaicas o macrogranjas; el problema de contaminación de acuíferos, o la falta de mantenimiento de las fuentes y conducciones para riego, entre otras. Es fundamental que las explotaciones agrarias sean rentables y para ello se aportaron algunas ideas como la posibilidad de transformar a través de obradores compartidos. También se planteó desarrollar normativa que regule el uso del suelo.

 

Respecto al cuidado y salud del suelo en Sierra Nevada, se destacó el problema de la erosión y la falta de regeneración de la vegetación, la pérdida del conocimiento sobre el patrimonio etnológico o la necesidad de acompasar la normativa medioambiental y la agraria. También se incidió en la importancia de aclareo de los bosques de pinos y de los piornales. Como propuestas, se comentaron la priorización de las razas autóctonas a la hora de aplicar ayudas, o la mejora del manejo de la ganadería, para lo que se podrían utilizar nuevas tecnologías como collares para cercas virtuales. 

 

En ambos territorios se manifestó la preocupación por el relevo generacional, y la oportunidad de realizar acciones de concienciación sobre la importancia del suelo, y acciones de promoción que permitan mejorar el conocimiento de la población sobre el valor de la ganadería y la agricultura y su aportación al medio ambiente, así como su vinculación con el sector turístico, asociando el consumo de la producción a los servicios ecosistémicos que aportan.

 

En octubre tendrán lugar las próximas reuniones donde se seguirá avanzando en las propuestas que se recogerán en los acuerdos territoriales para la mejora de la Salud del Suelo de ambas comarcas. Una hoja de ruta para abordar de forma conjunta las necesidades detectadas mediante soluciones planteadas de forma colaborativa, que deberán suscribir los agentes del territorio.