30 de enero día de la paz

INTRODUCCIÓN

                                

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Créditos

Desde el norte hasta el sur, de oriente hasta occidente, los niños y niñas del mundo hacen y desean lo mismo que vosotros. Les encanta jugar al escondite, con las muñecas, correr, saltar, etc. Disfrutan yendo a la escuela, escuchando música, bailando y haciendo deporte. Pero también les asustan las guerras y desean la paz. Se preocupan por el medio ambiente que los mayores estamos estropeando y por muchas cosas más.

En todos los lugares del mundo los niños y niñas no tienen los mismos beneficios que vosotros tenéis, pues mucho de ellos pasan hambre, no tienen agua suficiente, padecen enfermedades que se podrían curar si tuvieran vacunas o medicamentos suficientes, y un larga lista de cosas que sería casi interminable.

Los niños y niñas que viven en naciones desarrolladas, en su gran mayoría, tienen esas necesidades primarias cubiertas. Aunque es cierto que también existen niños en estos países que lo pasan mal.

La palabra paz la mayoría de las veces la unimos sólo al significado que no haya guerra. Pero PAZ es eso, que no haya guerras, pero también algo más, que no haya injusticias, que no existan tantas desigualdades, que las personas tengan un techo digno, que no pasen hambre, ni sed, etc.

Pero la paz no se construye sola, hay que ayudar a construirla entre todos. No solo los dirigentes políticos, sino todos y cada uno de los seres humanos.

¿Cómo podéis contribuir vosotros a la paz del mundo?

Pues empezando por vosotros mismos: obedeciendo, estudiando, respetando a los demás, desde vuestros padres hasta vuestros compañeros y compañeras. Cumpliendo las normas que os impone vuestra sociedad, vuestro colegio y contribuyendo al bien común. Aportando y compartiendo lo que tenemos, incluso privándonos de nuestros caprichos para que esa cosa o el dinero que malgastamos llegue a los desfavorecidos.

Para que comprendáis que no en todos los sitios se vive igual, vamos a realizar un viaje a ciertos países y que a pesar de las diferencias, hay cosas que nos unen. Un ejemplo es la cultura, el saber y os proponemos dentro de este trabajo, que a través de la historia, las costumbres y sobre todo de la palabra y la música, las personas son capaces de entenderse.