El Consejo de Gobierno ha aprobado el Plan de Internacionalización de la Empresa Andaluza 2002, documento que establece los objetivos estratégicos y las condiciones para mejorar la competitivad empresarial de Andalucía en los mercados exteriores. Este plan ha sido elaborado por la Consejería de Trabajo e Industria en colaboración con la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) y los sindicatos UGT y CCOO, en el marco del Pacto por el Empleo y el Desarrollo Económico de Andalucía.
El Plan de Internacionalización cuenta con una dotación económica por parte de la Junta de 7.152 millones de pesetas, a la que se añadirá la financiación de otras instituciones y organismos. Sus principales objetivos se encaminan a obtener una mayor rentabilidad de los actuales instrumentos de promoción y a desarrollar nuevas iniciativas para facilitar la salida al exterior de las pequeñas y medianas empresas.
En este sentido, el plan propone una acción integrada de apertura de las empresas andaluzas a los mercados exteriores, consolidación de su presencia y ampliación de la misma desde las empresas tradicionalmente exportadoras a otros sectores estratégicos para la economía andaluza con un buena posición competitiva.
El documento aprobado hoy establece cinco líneas de apoyo mediante un esfuerzo unitario por parte de los distintos órganos de la Administración, las Cámaras de Comercio, Industria y Navegación, la Confederación de Empresarios de Andalucía y todos los demás agentes implicados en la internacionalización de las empresas andaluzas.
Las cinco líneas de apoyo formuladas se dirigen a otros tantos grupos estratégicos en los que se integran los sectores de mayor relevancia en la economía andaluza, cuyas necesidades han sido definidas tras los trabajos realizados con anterioridad a la elaboración del plan para identificar los elementos que caracterizan la presencia andaluza en el exterior, las características de las empresas exportadoras y los obstáculos que hay que salvar para que las no exportadoras amplíen sus mercados.
Estos cinco grupos, para los que se fijan estrategias específicas de promoción exterior de acuerdo con sus características estructurales y competitivas, son los siguientes: el denominado "Ápice", que engloba a los sectores mejor situados en las actividades externas; "Lanzadera", cuya propensión exportadora está por debajo de las posibilidades de los mercados; "Pivote", conformado por sectores ya exportadores pero con mercados estancados; "Umbral", en el que se combina una deficiencia estructural con mercados en crecimiento, y "Zaga", grupo formado por sectores con escasas posibilidades y mercados estancados.
El texto aprobado hoy por el Consejo recoge las actuaciones concretas de cada una de las estrategias propuestas agrupándolas en programas de diversificación territorial y apertura de nuevos mercados, promoción exterior directa, búsqueda de mercados emergentes y mejora competitiva para la apertura exterior.
Para la aplicación de estos programas, el Plan de Internacionalización establece la creación de dos redes, una interior y otra exterior, en la que se aglutinan todas las instituciones, administraciones, agentes privados y organizaciones interesadas en el comercio exterior.
De la red interna formarán parte la Confederación de Empresarios de Andalucía, las Cámaras de Comercio, el Instituto de Fomento de Andalucía y los Consejos Reguladores de Denominaciones de Origen, así como organizaciones de exportadores e instituciones tecnológicas, entre otras, bajo la dependencia de la Dirección General de Comercio, Consumo y Cooperación Económica.
En cuanto a la red externa, se propone una estrecha colaboración con el Instituto de Comercio Exterior -dependiente de la Administración Central- para reforzar la apertura andaluza al exterior en cuestiones como la presencia del personal de las instituciones andaluzas de promoción en las oficinas comerciales españolas en aquellos países que se consideren interesantes.
El plan aprobado hoy también prevé la creación de un Consejo Asesor de Promoción Exterior que integre a todas las administraciones, instituciones públicas y privadas y organizaciones vinculadas a estas actividades.
Asimismo, se definen iniciativas de información sobre los mercados y sus posibilidades; formación de especialistas, profesionales del sector y empresarios, asesoramiento a las administraciones y a las entidades privadas; promoción directa;
logística para definir distintos soportes en función de los mercados en los que se pretende trabajar y apoyos públicos a las empresas exportadoras o para resolver los problemas en este campo.
En cuanto a la distribución de los 7.152 millones presupuestados por la Junta para este plan en sus cuatro años de aplicación, 3.555 millones se destinan a acciones genéricas de promoción comercial; 2.322 a acciones específicas para la internacionalización; 207 a un programa de becarios de comercio exterior; 238 al programa PIPE-2000 en colaboración con las Cámaras de Comercio y 829 a formación en comercio exterior. Para este año, el presupuesto alcanza los 1.725 millones de pesetas.