El Consejo de Gobierno ha declarado bien de interés cultural, con categoría de zona arqueológica, la factoría romana de salazones del antiguo Teatro de Andalucía, en Cádiz. Esta iniciativa se sustenta no sólo en la relevancia histórica del enclave, sino también en los aspectos pedagógico y turístico del mismo, así como en la necesidad de su conservación y protección.
Con el acondicionamiento y puesta en valor de estos restos, la ciudad de Cádiz podrá contar con un itinerario turístico más completo alusivo al esplendor de la ciudad durante el período romano. Esta ruta se añadirá además a la visualización de los restos urbanos de la llamada Ciudad Nueva o Neápolis, construida en tiempos de Balbo el Menor, que comprende la visita al Teatro Romano recientemente abierto al público por la Consejería de Cultura; también podrá visualizarse un sector de la necrópolis imperial, igualmente acondicionados y puestos en valor por dicha consejería.
La factoría de salazones del Teatro Andalucía se distribuye a la manera clásica, con piletas alineadas alrededor de una sala a cielo abierto. El complejo industrial sólo está descubierto en parte ya que el resto de la fábrica y otras dependencias quedan situadas fuera del recinto del solar. La construcción de este conjunto está datada hacia el siglo I antes de nuestra era, y su abandono se produjo unos seiscientos años después.
El expediente de declaración de bien de interés cultural fue incoado el 8 de mayo de 1996 por la Dirección General de Bienes
Culturales de la Consejería de Cultura, documento que fue objeto de informe favorable por parte de la Comisión Provincial de Patrimonio Histórico de Cádiz el 10 de julio de 1997. Terminada la instrucción del expediente y emitida la correspondiente declaración, la antigua fábrica romana queda incluida en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz.