La inquietud por la danza en Cádiz viene de la mano de la profesora de danza clásica Dª Emilia Zambrano, que en la década de los 80, pide al Conservatorio de Música Manuel de Falla un aula para ejercer de forma oficiosa sus enseñanzas, ya que al no estar reconocido el centro como oficial, el alumnado tiene que examinarse en Sevilla para conseguir su titulación y terminar sus estudios.
Durante la década de los 90 el incremento de alumnado es significativo y en el año 1988 se crea el nuevo Conservatorio Profesional de Danza de Cádiz, en un espacio cedido por el CEIP Campo del Sur, quedando así el Conservatorio dentro de la red de centros de la Junta de Andalucía.
Por entonces con pocos medios: 35 alumnos y 7 profesores el centro fue creciendo, gracias al tesón, profesionalidad, ilusión y dedicación de toda la comunidad educativa. Por falta de espacio, el centro se trasladó al CEIP Arbolí en el casco antiguo de la ciudad, que con varias reformas cumplió con las necesidades que hacían falta en el momento.
El Conservatorio siguió creciendo y lo que fue un sueño en aquella época, hoy es una realidad, que son las magníficas instalaciones del complejo educativo de la Casa de las Artes, sede actual del centro.
Humildemente podemos presumir de haber formado alumnos que forman parte de los Claustros de otros Conservatorios, de compañías de baile, alguna primera figura y los que emprenden su propia academia privada o escuela. Los que hoy son alumnos, el día de mañana serán profesionales y/o profesores y nos volverán a mandar savia nueva al centro, cerrando así el bonito ciclo de la vida educativa.
