Fecha: 17 - 25 de noviembre de 2020
Espacio: Capilla de San Bruno y Oratorio de Santa Catalina
Colabora: XXI Bienal de Flamenco

La vigilia perfecta es el nombre del proyecto de Andrés Marín para la XXI Bienal de Flamenco de Sevilla. Este artista es uno de los bailaores más singulares del panorama flamenco actual. Sus producciones se han centrado en la tradición flamenca, pero no desde una perspectiva convencional sino a través de un estilo personal y una estética de absoluta contemporaneidad.

La obra contempla un conjunto de micro-piezas de danza que fueron ejecutadas en el CAAC el pasado 3 de octubre por las dependencias del antiguo monasterio y fábrica de cerámica en las denominadas horas canónicas, desde antes del amanecer hasta la hora de completas, en un espectáculo abierto. Todo el proceso fue documentado y filmado y constituye ahora una obra de arte visual.

En La vigilia perfecta, cada segmento de danza se relaciona con la actividad propia de un momento del día, siguiendo la secuencia de las horas litúrgicas: Maitines, Laudes, Prima, Tercia, Sexta, Nona, Vísperas y Completas. Esta actuación pretende ser un hito más en el camino de búsqueda de Andrés Marín dentro del baile flamenco, camino que, al menos en esta ocasión, es más bien un heterodoxo cruce de citas y referencias: los monjes cartujos y los obreros de Pickman, sí, pero también Samuel Beckett, Dante o Zurbarán.

Marín, siempre en la búsqueda nuevos caminos por explorar a partir de la tradición flamenca, ha colaborado con artistas de diversas disciplinas a lo largo de su carrera. En esta ocasión ha contado con el artista plástico José Miguel Pereñíguez, que se ha encargado de crear todos los elementos escenográficos y vestuario que luce el bailaor y que pueden verse en la sala.