José López Rubio nació el 10 de septiembre de 1903 en Motril y pocos meses después fue llevado a Granada donde transcurrió su infancia. Se trasladó a Madrid con su familia con 13 años y entre 1917 y 1919 residió en Cuenca. Durante esa época, realizó colaboraciones en el único periódico local. Allí, estrenó en una compañía infantil una especie de sainete y obtuvo un premio en un certamen de teatro en 1918.

De nuevo en Madrid estudió Derecho y frecuentó tertulias literarias que le acercarán a las vanguardias literarias q allí se citaban. Colaboró en varias revistas ilustradas y escribió algunos cuentos para Los lunes de El Imparcial que luego reunió en su primer libro, Cuentos inverosímiles. Colaboró en El Sol, La Nación y otros diarios. Recibió el premio ABC de autores noveles por su comedia "De la noche a la mañana" (1928), en colaboración con Eduardo Ugarte, estrenada al año siguiente en el Teatro Reina Victoria, y poco después en Buenos Aires; en breve la traducen al inglés, al italiano y al portugués y se estrena en Londres, Milán y Lisboa. Con el mismo colaborador escribió "La casa de naipes" y escribió piezas teatrales en colaboración con Enrique Jardiel Poncela y Edgar Neville, y ocasionalmente fue actor en El Mirlo Blanco.

En 1930 interrumpe su actividad teatral por la cinematográfica; hasta 1935 residirá en Hollywood, contratado por la Metro Goldwyn Mayer como adaptador, dialoguista y traductor de las versiones españolas de sus películas; también trabajó para la Fox hasta 1935. Allí ejerció además como guionista y fue amigo de grandes del celuloide como Charles Chaplin, Stan Laurel o Buster Keaton.

En 1949 reemprende la actividad teatral. De su producción teatral de posguerra destaca, en especial, "Celos del aire", por la que obtuvo el Premio Fastenrath de la Academia. Estrena sucesivamente "Estoy pensando en ti", "Veinte y cuarenta", "Cena de Navidad", "Una madeja de lana azul celeste", "El remedio en la memoria", "El caballero de Barajas", "La novia del espacio", "Un trono para Cristi", entre otras. En 1954 recibió el Premio Nacional de Teatro y a partir de 1983 fue Académico de la Lengua. Murió en Madrid en 1996.

Su biblioteca especializada en humor y teatro, así como otros documentos personales, tal el que este mes os presentamos, pasó en 1992 a nuestro Centro y hoy está a disposición de investigadores, profesionales y otros interesados que los requieran.