Las Tenerías de Alcazarquivir están situadas en el extremo sur del barrio Bab el-Oued, justo al borde de la medina. Su ubicación en la medina es la habitual, evitando olores a la ciudad e intramuros al trazado de la muralla. El curtido y teñido de pieles es, junto al tejido de mantas y paños, una de las actividades que definen gran parte del sector artesanal de esta medina.
Su organización dispone varias extensiones de piletas de fábrica de ladrillo revestidas de mortero de cal, agrupándolas por zonas según la función que desempeñan en el proceso de curtido. Sus formas circulares o rectangulares obedecen a estas diversas funciones y a las distintas épocas de su construcción. Las playas de piletas quedan rodeadas por hileras de pequeños almacenes que, adosados a los límites del solar, guardan las pieles y utensilios de cada artesano. Aparte existen otras superficies destinadas al extendido y secado de las pieles, función para la que también se utilizan las azoteas de los almacenes.
En el momento de la intervención las Tenerías presentaban un deficiente estado de conservación, con numerosas piletas y canalizaciones rotas o en desuso y almacenes en mal estado. Por tanto esta primera fase tuvo como objetivo mejorar las condiciones de trabajo de los artesanos incidiendo en resolver de forma adecuada el suministro y, sobre todo, la evacuación de las aguas utilizadas en el proceso de curtido construyéndose para ello nuevas canalizaciones. También se trabajó sobre los almacenes, algunos de los cuales presentaban un estado casi ruinoso. En este sentido se preservaron las pocas fábricas de ladrillo que quedaban en buen estado, se rehicieron la mayor parte de ellas y se reforzaron numerosos tramos de cimentación. Se ejecutaron de nuevo todos los forjados de madera para las nuevas azoteas y se dotó a cada almacén de carpintería y suministro eléctrico individualizado.
Especial mención tiene la recuperación y puesta en uso de las piletas, reparándose muchas de ellas y construyéndose otras nuevas en función de las necesidades de los artesanos. Se dotó también de pavimentación a los espacios que rodean los diferentes conjuntos de piletas y dan servicio a los almacenes.
Finalmente se ejecutaron dos edificios abiertos para proporcionar espacios de trabajo protegidos en verano e invierno. Estas dos construcciones presentan una factura más elaborada, elementos de especial significado en el patio de piletas en contraposición con la austeridad de los almacenes. Completó la actuación la restauración del pequeño morabito enclavado en el interior del recinto.
E n esta primera fase se han conseguido rehabilitar 3.000 m2 de instalación, el 50% de la superficie total de las Tenerías, recuperando también 28 almacenes y actuando sobre un total de 96 piletas.