El Consejo de Gobierno ha aprobado el balance del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia en Andalucía para 2021, en el que se constata que la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación ha logrado reducir la lista de espera en un 49% desde el inicio de la legislatura, lo que ha permitido cerrar el año con el máximo histórico de 257.227 personas atendidas con 360.000 prestaciones.
El informe señala que el número de personas beneficiarias en la comunidad no ha dejado de crecer desde 2019 a pesar de la situación de pandemia, cuyos resultados han sido devastadores entre un colectivo tan vulnerable como el de las personas en situación de dependencia. Así, en 2021 se ha registrado un incremento neto de casi 45.000 personas atendidas y 80.000 prestaciones más que a finales 2018, pasando de 212.243 atendidos a finales de la anterior legislatura a los 257.227 incluidos en el sistema a finales de 2021.
Además, la evolución registrada en este último ejercicio de 2021 (con 28.672 nuevas personas atendidas y 48.861 prestaciones más) duplica los objetivos marcados por el Plan de Choque del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. Andalucía es la comunidad que ha incorporado en 2021 al mayor número de personas beneficiarias al sistema nacional de autonomía y atención a la dependencia, el 29,3% del total según los datos del IMSERSO.
Andalucía también es la región donde más ha descendido el número de personas con derecho a prestación pendiente de recibirlas, de forma que, según la evaluación del Ministerio, prácticamente la mitad de la reducción de la lista de espera nacional (47%) se debe a la labor realizada por la Consejería de Igualdad.
La lista de personas con derecho reconocido y pendiente de recibir una prestación adecuada a su situación ha pasado de las 75.097 contabilizadas en la lista de espera a 31 de diciembre de 2018 a las 38.325 de finales de 2021. El 85% de esa reducción se debe a que las personas han pasado a ser nuevas beneficiarias.
El informe valora que la Consejería de Igualdad ha realizado una inversión histórica durante 2021 en políticas sociales, más de 2.500 millones, de los que 1.741 corresponden a atención a la dependencia. Y señala que la Agencia de Servicios Sociales de Andalucía (ASSDA) ha alcanzado una ejecución presupuestaria del 99%.
Apuesta por un modelo profesionalizado
La Consejería de Igualdad apuesta por la prestación de servicios como modelo de atención profesional frente a las prestaciones económicas para cuidados en el entorno familiar. Así lo demuestra el aumento progresivo de personas usuarias del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD). Se trata del servicio más solicitado por los andaluces en situación de dependencia, y en 2021 ha alcanzado también el máximo histórico de 129.060 personas atendidas, lo que supone el 50% de atenciones en la comunidad. Estos datos representan, además, el 44% del total de esta prestación a nivel nacional.
Para garantizar la calidad del servicio y apoyar la viabilidad económica del mismo, dignificando además las condiciones laborales de las más de 35.000 personas trabajadoras en el SAD, la Consejería aprobó el pasado año un aumento del 12,3% del coste/hora, congelado desde 2007. Este precio se sitúa ahora en 14,6 euros la hora, frente a los 13 euros anteriores, y se aplica ya en 505 municipios andaluces, de los que 23 han complementado esa cantidad para contribuir a la mejora de las condiciones salariales. Asimismo, se ha abonado a las entidades locales 657 millones de euros para poder agilizar los pagos, una cifra que supone 286,75 millones más respecto al año 2018.
Casi 2.200 nuevas plazas residenciales
El balance de la Dependencia en Andalucía 2021 hace hincapié también en que el fortalecimiento del servicio residencial ha sido fundamental para reducir las listas de espera de personas en situación de dependencia. Frente a las 283 nuevas plazas en residencias y centros de día para personas mayores y personas con discapacidad creadas a lo largo de la legislatura 2015-2018, el actual Ejecutivo regional ha creado 2.168 nuevas plazas, de las que 1.064 se ejecutaron a lo largo de 2021. Se trata, dice el informe, del mayor incremento de plazas en Andalucía durante una legislatura.
Este esfuerzo de gestión para solventar los déficits estructurales que arrastraba el sistema de atención a la dependencia han valido a Andalucía una puntuación de 7,1 en la escala de valoración que utiliza el Observatorio de la Dependencia que publica cada año la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales. Se trata de la mejor valoración que ha recibido la comunidad en los últimos cinco años, y sitúa a Andalucía por encima del promedio nacional (fijado en 4,64 puntos), solo superada por Castilla y León.