La pena de prisión sólo puede ser sustituida por la de trabajos en beneficio de la comunidad. En este caso, la autoridad judicial impondrá al condenado adicionalmente las siguientes medidas:
- La sujeción a programas específicos de reeducación y tratamiento psicológico.
- La observancia de las obligaciones o deberes de:
- Prohibición de acudir a determinados lugares.
- Prohibición de aproximarse a la víctima o a determinados familiares, o de comunicarse con ellos.
No obstante, y conforme a lo dispuesto en el artículo 49 del Código Penal, los trabajos en beneficio de la comunidad no podrán imponerse sin el consentimiento del penado.