El Instituto Andaluz de la Mujer recuerda que las decisiones judiciales deben priorizar la protección de los menores

Tras el rechazo del Tribunal Constitucional de admisión a trámite del amparo solicitado por Juana Rivas, el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales ha manifestado que mantiene el máximo respeto al proceso y a las decisiones judiciales, recordando no obstante que el ordenamiento jurídico contempla que toda decisión e interpretación judicial vele por la protección de las víctimas "especialmente si son menores".

La directora del IAM, Elena Ruiz, ha recordado que se trata de un caso que responde "claramente" a situaciones de violencia de género, con condena judicial firme, "tras la cual víctima y agresor volvieron a caer en la dependencia emocional, repitiéndose así el ciclo de violencia machista, que sufren de manera directa los menores". "Un ciclo en el que la víctima ha dado el valiente paso de pedir ayuda para salir del bucle de una vez por todas, paso más difícil de lo que pensamos", ha explicado Ruiz, quien ha añadido que "si las instituciones animamos a las víctimas a pedir ayuda, cuando lo hacen no pueden encontrarse con problemas de procedimiento jurídico o coordinación internacional".

La directora ha reiterado que desde el IAM seguirá respetando la justicia, pero también "apoyando a la víctima y velando por el interés superior de los menores". Asimismo, ha recordado a la Fiscalía adscrita al Tribunal Constitucional que aún queda la opción del recurso de súplica, al tiempo que señalado al Gobierno central que hace apenas un mes se aprobó en comisión un Pacto de Estado contra la Violencia de Género, documento que contempla la reforma legislativa para la suspensión del régimen de visitas a menores por parte de padres condenados por violencia de género.

Finalmente, Ruiz ha subrayado que las niñas y niños que están expuestos a la violencia de género en sus hogares sufren conflictos psicológicos derivados de su situación, y corren el riesgo de reproducir esos patrones o padecer secuelas que lastren el resto de su vida.

El Instituto Andaluz de la Mujer ha atendido hasta junio a 429 menores, 205 niñas y 224 niños, en su Servicio de Atención Psicológica a Hijas e Hijos de Mujeres Víctimas de Violencia de Género, un programa que la Junta de Andalucía presta desde 2009 al considerar a los hijos e hijas como víctimas directas del maltrato machista. Desde su puesta en marcha, el servicio ha llegado a 3.666 menores víctimas, "una cifra que debe hacer pensar sobre la magnitud del delito de la violencia de género y de sus consecuencias sobre los menores".

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