La Junta de Andalucía, a través de una operación realizada por agentes de la Unidad del Cuerpo Nacional de Policía adscrita, conjuntamente con agentes de Medio Ambiente, ha sorprendido a cuatro personas cazando mediante prácticas ilegales y en una zona en la que no está permitida la actividad cinegética, en el paraje “Finca Inaza”, perteneciente a la localidad almeriense de Bayárcal.
El dispositivo se puso en marcha el pasado 20 de octubre con el objetivo de realizar labores de prevención de la caza furtiva, que llevan a cabo habitualmente los funcionarios de la Unidad de Policía Adscrita y los Agentes de Medio Ambiente. Durante el mismo, los agentes localizaron tres vehículos y sorprendieron a cuatro personas cazando que, al percatarse de la presencia policial, intentaron ocultar las piezas abatidas. Uno de los cazadores se dio a la fuga, pero fue identificado y denunciado, al igual que el resto. También incautaron los cadáveres de dos jabalíes.
Los cuatro cazadores realizaban un 'gancho' clandestino con piezas abatidas. Esta modalidad es una pequeña montería que se realiza sin autorización y sin ningún tipo de medidas de seguridad, ni control sanitario. De hecho, una de las piezas padecía tuberculosis, por lo que se evitó con esta intervención un problema de salud pública. Las piezas fueron analizadas por el servicio veterinario de una montería autorizada en el municipio, que constituyó la ‘Junta de Carnes’ y que detectó la enfermedad.
Los furtivos contaban con 13 perros de presa, algunos de los cuales carecían del chip de identificación, así como de la cartilla sanitaria y la vacuna antirrábica de carácter obligatorio, por lo que se interpusieron las correspondientes denuncias.
Como resultado de la actuación policial se han intervenido cuatro armas largas y los dos jabalíes abatidos mencionados anteriormente y se ha formulado denuncia administrativa contra los cazadores por infracción grave a la normativa de caza y de protección de la flora y fauna.
Estas actuaciones relacionadas con las actividades ilegales de caza (furtivismo), se desarrollan a requerimiento de la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente , en estrecha colaboración entre la Unidad de Policía Adscrita y los Agentes de Medio Ambiente, por lo que se vienen estableciendo en el monte dispositivos de control y seguimiento de personas, cuando existen indicios de que puedan practicar la caza furtiva, ya sea para hacerse con trofeos de caza o con la carne de los animales.
