Informe de Medio Ambiente en Andalucía (iMA)

El seguimiento de las aves esteparias

En el marco del Plan de Recuperación y Conservación de Aves Esteparias se ha realizado en 2021 el censo de las poblaciones reproductoras de avutarda común, alondra ricotí, aguilucho cenizo y sisón común. • En el caso de la avutarda se ha estimado una población de 370 individuos, ligeramente mayor a la de 2020, en 10 núcleos diferentes dentro de las dos subpoblaciones andaluzas, la situada en el Valle del Guadalquivir y la del norte de Sierra Morena, con el 68% y el 32% de la población, respectivamente. Estos resultados indican que la tendencia de la población reproductora en el periodo 2003-2021 se ha estabilizado, teniendo en cuenta que en 2003 se estimaron 325 aves. Sin embargo, los datos de los últimos años muestran que desde 2016, cuando se estimaban 470 aves, la especie ha entrado en una fase de declive constante. De hecho, a lo largo de los últimos 10 años se ha producido una concentración en las ZEPAs, Campiñas de Sevilla y Alto Guadiato en Córdoba (con más del 60% de los efectivos estimados en 2021) y los núcleos pequeños han ido reduciéndose. Las áreas definidas como Zonas del Ámbito de Aplicación del Plan de Recuperación de Aves Esteparias (ZAPRAE) acogen el 93% de la población de avutardas, para la que se han determinado 121 machos y 249 hembras, lo que define un sex ratio de 2,1, que se encuentra dentro de los valores de referencia (entre 1,5 y 3,0) para la proporción de sexos propia de poblaciones estables. La pérdida y deterioro del hábitat continúa siendo la principal amenaza de la especie, junto a la mortalidad no natural. • Pero la especie en una situación más delicada de conservación es la alondra ricotí , con una estimación de 23 territorios de reproducción, todos en Almería, que suponen cinco más que en 2020, consecuencia de la recolonización de un núcleo antiguo en Baza-Filabres. Al igual que ocurriera en 2020, en el año 2021 se constata la no aparición en Padul (Granada), donde la especie contaba con dos machos hasta 2019. La especie sigue en situación crítica en los últimos años por el pequeño tamaño de los núcleos poblacionales y el alto grado de aislamiento y fragmentación del hábitat, generalizado en toda su área de distribución ibérica, aunque más patente en las poblaciones periféricas, de las cuales la andaluza es la más meridional y aislada. • Otra de las especies que en los últimos años se está enfrentando a una delicada situación es el sisón común . En 2021 se ha estimado en 1.850 la población de machos territoriales, lo que supone un 45% menos que en el censo nacional de 2016. De manera similar ha disminuido la densidad, 0,3 machos/ km² en 2021 respecto a los 0,6 machos/km² de 2016 o los 1 machos/km² de 2010. La especie muestra un moderado declive desde que se hace seguimiento (periodo 2005-2021), si bien desde 2010 la población ha descendido de manera alarmante en dos terceras partes. • Por otro lado, el programa de conservación del aguilucho cenizo ha estimado en 2021 entre 574 y 597 parejas, calculando un valor medio de 586, 32 más que en 2020, pero manteniéndose la tendencia regresiva de la especie en la Comunidad. Se ha calculado una tasa de declive anual del -3,69%, la más elevada desde que se realiza seguimiento de la especie, teniendo en cuenta que se estiman 1.458 parejas a principios de siglo. Estas parejas se distribuyen fundamentalmente por las campiñas cerealistas del Valle del Guadalquivir, Cádiz, y Granada y en áreas peri marismeñas, siendo Sevilla la provincia con mayor número de nidos y parejas localizadas todos los años de seguimiento. Los esfuerzos del programa de seguimiento y vigilancia de la especie, asumiendo la dificultad que entraña, han conseguido que al menos hayan volado con éxito un mínimo de 683 pollos de 268 nidos exitosos de los 591 seguidos con un 44,5% de éxito reproductor, menor a las anualidades anteriores y una tasa de vuelo de 2,59.

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