Guía de Identificación de Hábitats de Interés Comunitario en Andalucía

119 3170 Estanques temporales mediterráneos* Según el “Interpretation Manual of European Union Habitats - EUR28 ” ( abril, 2013; EUROPEAN COMMISSION DG ENVIRONMENT ) los “Estanques temporales mediterráneos*” se corresponden con lagunas y charcas temporales de escasa profundidad (unos pocos centímetros), que sólo existen en invierno o a finales de la primavera, con una flora compuesta principalmente de especies terófitas y geófitas mediterráneas pertenecientes a las alianzas Isoetion, Nanocyperion flavescentis, Preslion cervinae, Agrostion salmanticae, Heleochloion y Lythrion tribracteati. Aunque, en principio, la definición expuesta parece clara, con este hábitat hay cierta polémica en cuanto a la interpretación e identificación (por coincidencia y super- posición con otros HIC del mismo grupo), al igual que ocurre con gran parte de los HIC pertenecientes al subgrupo 31 Aguas estancadas. En el mismo EUR28 se indica que este HIC es una variedad particular del “HIC 3120 Aguas oligotróficas con muy bajo conte- nido de minerales, generalmente en suelos arenosos del Mediterráneo occidental, con Isoetes spp.”, no considerado para España y cuya definición, además, coincide en parte con los HIC “3110 Aguas oligotróficas, de las llanuras arenosas, con un contenido de minerales muy bajo ( Littorelletalia uniflorae )  + ”, y “3130 Aguas estancadas desde oligotróficas hasta mesotróficas con vegetación de Littorelletea uniflorae y/o Isoeto-Nanojuncetea ” (este último tampoco reconocido para España). Todas estas incongruencias definitorias dificultan la interpretación de las lagunas temporales andaluzas. En Andalucía, las condiciones climáticas deteminan la dinámica anual, e incluso plurianual, de estos medios y, por tanto, de sus comunidades. La superficie ocupada por el agua o por la vegetación carac- terística suele variar de un año a otro (y dentro del mismo año), mostrando exten- siones y niveles máximos en los más lluviosos y mínimas en los más secos (en años de sequía, o de lluvia insuficiente, puede que estas formaciones no lleguen a desarrollarse). Además, en la región andaluza, las lluvias se concentran entre finales del otoño y en el invierno, y decre- cen según avanza la primavera, para culminar en un periodo estival de marca- da sequía anual (que puede iniciarse bastante antes del verano), ocasionando que gran parte de los cuerpos de agua se sequen totalmente o que queden reducidos a una mínima parte de su extensión total algunos veranos. También afectan, aunque en menor medida, el régimen hidrológico, las características del suelo y las propiedades físico-químicas del agua. Por estos motivos, las comunidades vege- tales características y definitorias de diver-