Guía de Identificación de Hábitats de Interés Comunitario en Andalucía

128 3250 Ríos mediterráneos de caudal permanente con Glaucium flavum Ríos de las regiones de clima mediterráneo con caudal permanente, aunque fluctúe a lo largo del año. Presentan, en sus márgenes, depósitos aluviales de grava colonizados por vegetación pionera de porte bajo. Ríos permanentes con depósitos aluviales co- lonizados por vegetación perenne o anual tí- pica, sometidos a inundación solo en fuertes avenidas. La presencia de sus comunidades características, o de vestigios de las mismas, en guijarrales riparios es suficiente para su re- conocimiento. Esta vegetación se caracteriza por su estructura dispersa y sus pocas plantas características y, tras perturbaciones, es habi- tual su desaparición y posterior reaparición en medios adecuados. Las formaciones presididas por Andryala ragusina y las caracterizadas por Silene inaperta subsp. inaperta están muy extendidas en los cauces de gran parte del territorio, tanto en sustratos silíceos como carbonatados. Las comunidades con Forsskaolea tenacissima se limitan a las ramblas del Desierto de Tabernas. También se consideran manifestaciones de este HIC 3250, las localizadas en ríos mediterrá- neos que sufren fuertes estiajes (no permanen- tes o estacionales), o en las ramblas de mayor entidad y suficiente nivel freático Cursos de agua mediterráneos de carácter permanente, con fluctuaciones a lo largo del año (mínimos en verano), o estacionales. Presentan depósitos aluviales de gravas y cantos en los márgenes, colonizados por co- munidades vegetales ralas y especializadas. La vegetación de estos entornos ribereños está sometida a diferentes perturbaciones debi- das al exceso o defecto de agua. Las primeras se producen por las arroyadas durante las crecidas periódicas (efectos mecánicos so- bre la vegetación y sobre el sustrato). Las segundas derivan de la intensa insolación y evaporación estival, incrementada con la disminución del nivel del agua y la escasa capacidad de retención hídrica del suelo. En estas condiciones son muy pocas las especies que pueden sobrevivir, formando comunidades