Guía de Identificación de Hábitats de Interés Comunitario en Andalucía

307 Son frecuentes en litosuelos calizos, formacio- nes kársticas como lapiaces o calizas compac- tas de la base de acantilados con suelos más o menos evolucionados, donde la vegetación sufre largos periodos de estrés hídrico aunque las precipitaciones no sean tan escasas. Tole- ran la sequía algo mejor que los acebuches y pueden vivir en ombroclimas de seco a húmedo (entre 350 y 1.000 mm anuales). Los algarro- bales y las formaciones mixtas de algarrobos y acebuches de este HIC 9320_1 + , al igual que los acebuchales de bujeo (HIC 9320_0) son ele- mentos naturales de especial interés en áreas intensamente transformadas y, con frecuencia, constituyen los únicos fragmentos naturales Además de algarrobos y acebuches son comunes arbustos como Rhamnus myrtifolia, R. lycioides subsp. oleoides, Pistacia lentiscus, Myrtus com- munis, Crataegus mongyna, Phillyrea latifolia, Rhamnus alaternus, Ruscus aculeatus, Crataegus mongyna brevispina o Asparagus albus y lianoi- des como Tamus communis, Clematis cirrhosa, Smilax aspera, Aristolochia baetica, Rubia pe- regrina subsp . longifolia, Bryonia dioica o Vinca difformis. Cuando el suelo lo permite y los bos- ques se encuentran en buen estado de conserva- ción, los individuos tienen elevado tamaño y las formaciones son muy cerradas, casi impenetra- bles. En los claros de algarrobales abiertos son frecuentes espinares, aulagares y pastos anuales. 30070 de vegetación forestal remanente, de ahí la necesidad de conservarlos. Gracias a la domi- nancia de especies rebrotadoras, tienen gran capacidad de recuperación tras perturbaciones como el fuego o la tala, siempre que el tiempo de recurrencia sea suficientemente amplio. Es una especie extendida por el hombre, por su ca- pacidad de mejorar el suelo y por la importan- cia de su fruto, la algarroba, de gran transcen- dencia económica, social y cultural. De hecho, existen numerosas variedades para su cultivo adaptadas a distintas condiciones ecológicas y con distintas características del fruto. Sin em- bargo, su presencia como formación natural es bastante limitada. Ceratonia siliqua Ceratonia siliqua

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