Erizo de púas largas (Centrostephanus longispinus)
Andalucía presenta una elevada biodiversidad marina. Se estima que hay varios miles de especies marinas en la zona, sin embargo no existe ningún inventario completo de esta biodiversidad. Desde la puesta en marcha del Programa de Gestión Sostenible del Medio Marino Andaluz en 2004, se plantean dos objetivos fundamentales en esta línea:
- Elaborar un listado actualizado lo más exhaustivo posible de las especies marinas que viven en Andalucía, centrado principalmente en el grupo de los invertebrados.
Para ello se ha realizado una labor intensa durante estos primeros años, dedicando un buen número de inspecciones a lo largo de todo el litoral andaluz desde la zona supralitoral hasta los 30 metros de profundidad. En 2007 se incluyeron además al grupo de las algas y durante 2008 se incorporaron a los listados, especies de vertebrados (aves y mamíferos marinos).
- Elaborar un inventario de las biocenosis (ecosistemas marinos) existentes en Andalucía a partir de datos obtenidos de estas mismas inspecciones.
Una biocenosis es un espacio donde se desarrollan o pasan parte de su vida una multitud de especies concretas adaptadas a unas condiciones ambientes determinadas (de luz, de temperatura o de salinidad entre otras). Una facies es la ‘cara visible’ que puede presentar una biocenosis determinada, por la existencia de una o más especies dominantes en la misma.
Muchas de estas biocenosis corresponden con ecosistemas: Habitats de interés comunitarios, según la Directiva Habitat 92/43/CEE, y su presencia justifica la declaración en Andalucia, de 21 LICs marinos o marítimo-terrestres.
Cueva del Sifón (LIC Maro-Cerro Gordo). Málaga
Los trabajos han consistido en inspecciones de campo y estudios de gabinete.
Los trabajos de campo consisten en inspecciones por tierra por los pisos supra y mesolitoral e inspecciones de buceo en apnea o con botellas por el piso infra y circalitoral hasta los 30 m de profundidad.
Durante las inspecciones se identifica el tipo de sustrato y las especies animales y vegetales que se observan a simple vista, anotando todos los datos en una tablilla sumergible. Aquellas especies que no pueden identificarse “in situ” se recolectan o fotografían para su posterior identificación en el laboratorio. En el sustrato arenoso, donde la mayoría de las especies viven enterradas, se coge una muestra de arena para poder recolectarlas y determinarlas posteriormente en el laboratorio.
Teniendo en cuenta determinados aspectos físicos de la zona inspeccionada (tipo de sustrato, profundidad, intensidad lumínica, etc.), se clasifican las biocenosis observadas, y se determina la existencia de facies dentro de las mismas en base a un listado elaborado a partir de información existente en la bibliografía.
Debido al amplio espectro de información que se integra en el inventario (a nivel específico y/o de ecosistema), ha sido necesario a lo largo de estos años diversificar las rutinas de trabajo del equipo técnico de forma que se realicen esfuerzos equilibrados en los diferentes ambientes objeto de trabajo, consolidando en paralelo las diferentes metodologías necesarias en función de la tipología del dato buscado: el grupo biológico y/o la escala requerida.
Todo este trabajo realizado, permite disponer en la actualidad de una primera aproximación a la biodiversidad marina y del litoral andaluz aunque el estado del conocimiento sobre la diversidad biológica de las costas andaluzas sigue presentando importantes lagunas principalmente por dos razones:
- Los datos recopilados hasta el momento se centran especialmente en determinados grupos taxonómicos: invertebrados bentónicos, fanerógamas, mamíferos, aves y reptiles. Respecto al grupo de las algas marinas, aunque se han invertido esfuerzos para inventariarlo, no se han tenido en cuenta en los inventarios actuales porque el procesado de las muestras se ha realizado de manera desigual sobre el territorio.
- Los mayores esfuerzos para el inventario y seguimiento de hábitats y biocenosis, se concentran en los pisos supralitoral hasta el infralitoral (aunque se han realizado inmersiones hasta los – 30 m).
Alcyonium acaule
Con los primeros datos se elaboró un inventario preliminar de especies y biocenosis para Andalucía y se realizó una propuesta de especies marinas amenazadas, formalizada a través de la publicación del Libro Rojo de los Invertebrados de Andalucía.
Los esfuerzos realizados ofrecen información determinante relativa al estado de conservación de las especies marinas amenazadas y de los ecosistemas más vulnerables de la costa andaluza. El inventario contabiliza más de 6.000 citas de un total de aproximadamente 1.000 especies marinas diferentes y más de 3.000 citas de aproximadamente 150 biocenosis diferentes. La información asociada a algunas de estas especies no es idéntica, ya que desde 2006, se realizan esfuerzos extra en el seguimiento de 7 especies de invertebrados marinos catalogados, de las 4 especies de fanerógamas marinas presentes en Andalucía, de 16 especies de cetáceos, 2 especies de tortugas marinas y de las 9 especies de aves marinas incluidas en la Directiva Aves.
- la distribución de la especie (área y patrones de distribución)
- el tamaño de sus poblaciones (abundancia o biomasa)
- el estado de conservación de las mismas (estructura demográfica).
- para el caso concreto de los cetáceos y tortugas marinas, diagnóstico de la situación sanitaria de las especie (causas de muerte de animales varados muertos en las costas y tratamiento y recuperación de los animales que aparecen varados vivos).
Los resultados actuales de inventarios de biocenosis y de especies pueden consultarse en los Informes regionales anuales.