La coordinación de los distintos programas de conservación es fundamental para optimizar los resultados en materia de lucha contra el veneno.
Mediante reuniones se intercambian ideas y se da a conocer las medidas de actuación más relevantes, así como se solicita colaboración para la mejora de las actuaciones encaminadas a erradicar el empleo de venenos y minimizar el impacto potencial del veneno en las especies más amenazadas por esta práctica.
Es de destacar las actuaciones en Castril con el quebrantahuesos. Independientemente de las acciones que venían desarrollándose, en julio de 2011 se diseñaron un nuevo conjunto de medidas destinadas a potenciar la lucha contra el veneno en la sierra. Las medidas vienen recogidas en el documento “Refuerzo de Actuaciones para la erradicación del uso del veneno en el Parque Natural de la Sierra de Castril y en las vecinas sierras de La Cabrilla y del Pozo (P. N. de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas)”.
Del mismo modo, con la idea de frenar la mortalidad por veneno en los territorios de cría de alimoche, al inicio de la temporada 2011 técnicos de la Estrategia Andaluza de Veneno (EAV) y del Plan de Recuperación y Conservación de aves necrófagas diseñaron un novedoso plan que incluía entre otras acciones, vigilancia e inspecciones técnico oculares y caninas intensivas en los territorios ocupados de alimoche por Agentes de la Autoridad y técnicos de la EAV.
Así mismo, las sueltas de los primeros linces en Guadalmellato y Guarrizas hacen necesario prevenir riesgos derivados de la presencia de cebos envenenados u otras artes ilegales. Por ello, desde 2011 se desarrollan inspecciones preventivas caninas.
Tambien se realizan labores de asesoramiento al programa LIFE PLUTO, que se centra en formar unidades caninas para toda Italia.