El Plan Andaluz de ITS, VIH y SIDA 2023-2030 (PAITSIDA) tiene como propósito facilitar la adopción e implementación de medidas necesarias que permitan orientar la organización de los servicios sanitarios y sociosanitarios hacia la promoción de la salud y la prevención del VIH y de otras enfermedades ITS, mejorando la calidad y la esperanza de vida de las personas que padecen VIH, previniendo las complicaciones y comorbilidades asociadas al diagnóstico, facilitando el tratamiento, manejo y continuidad asistencial de estas patologías y reduciendo la estigmatización asociada a éstas.
El PAITSIDA cuenta con siete líneas estratégicas, que a su vez se dividen en distintos objetivos y acciones. Así, la primera línea aborda la promoción de la salud sexual y disminución del estigma; la segunda, la prevención del VIH y otras ITS; la tercera, el diagnóstico precoz; la cuarta, la vigilancia epidemiológica; la quinta, el modelo organizativo de la atención sanitaria y del seguimiento de las personas con VIH y otras ITS; la sexta, la formación e investigación, y la última de las líneas, la responsabilidad compartida y alianzas estratégicas.
En el Plan Andaluz de ITS, VIH y SIDA 2023-2030 (PAITSIDA) se determinan veinticuatro OBJETIVOS ESPECÍFICOS que, de forma general, se orientan a:
- La sensibilización en materia de salud sexual y la promoción de conductas de reducción del riesgo.
- La mejora de la accesibilidad a recursos de prevención equitativos, con especial atención a población en situación de mayor vulnerabilidad.
- La potenciación de los cribados para la mejora del diagnóstico precoz de las infecciones.
- La optimización de los sistemas de registro y notificación para el seguimiento de casos.
- El adecuado tratamiento coordinado de las infecciones y el seguimiento y cuidado de la calidad de vida de las personas afectadas.
- El impulso de investigación y formación especializada a profesionales en este ámbito de actuación.
- El fomento de la coordinación inter-estrategias y alianzas con agentes clave.
Los objetivos se pretenden alcanzar mediante la puesta en marcha de cincuenta ACCIONES descritas en el Plan, que posteriormente podrán ser valoradas a través de sus correspondientes INDICADORES de realización, también definidos ex profeso. Tales indicadores configuran el sistema de evaluación y seguimiento que permitirá medir el grado de alcance de los objetivos. Se obtendrán de sistemas de información existentes o con la puesta en marcha de los mecanismos necesarios desde el propio Plan.
Para detectar posibles desviaciones respecto a lo planificado y realizar las correcciones oportunas en el proceso de implantación (evaluación intermedia), y también para valorar los resultados obtenidos y elaborar conclusiones y recomendaciones para futuras planificaciones (evaluación final), se establecen una comisión y diferentes subcomisiones responsables de la implantación