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Examen médico a mayores: cómo ganar vida a los años

Los centros de salud andaluces realizan revisiones gratuitas anuales a los mayores de 65 años, con objeto de detectar posibles enfermedades y mejorar su calidad de vida

05/02/2007
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Después de toda una vida atendiendo las necesidades de su familia, Gracia Muñoz sabe bien cómo cuidar su propia salud y seguir manteniendo, a sus 69 años, la misma energía de la que siempre ha hecho gala. “Para sentirme bien procuro cuidarme, sobre todo con una alimentación variada, paseo todos los días y tengo siempre muy buen humor”, comenta. Unos hábitos que se han visto complementados con el examen y las valoraciones que le han realizado en su centro de salud con el fin de conocer de forma mucho más completa su situación y detectar aquellos aspectos en los que puede requerir una atención especial.

Gracia forma parte de los 1.134.000 andaluces que se benefician del examen de salud anual y gratuito que los centros de atención primaria de toda la comunidad realizan a los mayores de 65 años, con el objetivo de mejorar su calidad de vida y ayudarlos a prevenir posibles enfermedades.

Esta iniciativa permite actuar de forma anticipada en aquellos casos en que sea necesario, adaptando las actuaciones a las características concretas de cada paciente y contribuyendo a mejorar su estado de salud . “Antes, alguien que había cumplido los 65 años era un mayor; hoy la edad no está relacionada con el envejecimiento y, de hecho, estas personas tienen un estado de salud general muy bueno”, señala Cinta Pérez, médico de familia en el centro de salud de Mairena del Aljarafe (Sevilla).


Esta iniciativa permite actuar de forma anticipada
contribuyendo
a mejorar
el estado de salud de los mayores


Las enfermeras de familia son las profesionales encargadas de llevar a cabo una primera valoración a estos pacientes en los centros de salud, identificando su estado, sus necesidades de cuidados y grado de autonomía, y solicitando todas aquellas pruebas que puedan ser convenientes para conocer mejor su situación.

Las enfermeras facilitan también a los pacientes una cita con su médico de cabecera, de modo que sea este profesional el que evalúe los resultados obtenidos, realice el diagnóstico y proponga los tratamientos que puedan ser necesarios. En caso de que se detecten patologías, el paciente se incluye en el proceso correspondiente y se deriva al especialista cuando esté indicado.

Se trata de una “valoración de todos los patrones de salud”, en palabras de Eva Almán, enfermera de familia, que añade que también se presta una especial atención a todo aquello que tenga que ver con hábitos de vida. “Además de la vertiente médica, a estos pacientes se les ofrecen consejos para que sigan una dieta sana y hagan ejercicio físico, para que aprendan a cuidarse correctamente, para que salgan y se relacionen e incluso recomendaciones para minimizar el riesgo de caídas”, asegura.