Cada año, la llegada de las fiestas navideñas supone el aumento de la solidaridad con los más necesitados. Este gesto, que durante estas fechas suele centrarse en artículos como los alimentos o juguetes, debe hacerse extensivo también a un elemento tan vital como la sangre. En este sentido, la Consejería de Salud hace un llamamiento a los andaluces para que donen durante el periodo vacacional, ya que los desplazamientos provocan que habitualmente disminuyan las reservas. De hecho, durante las fiestas es incluso más necesario donar, puesto que los centros hospitalarios mantienen el mismo ritmo en cuanto a actividad quirúrgica.

En la medicina moderna, los tratamientos de cáncer, la cirugía compleja, la atención a los accidentes de tráfico o los trasplantes de órganos no podrían llevarse a cabo sin transfusiones. Detrás de todos estos avances están miles de donantes de sangre que los hacen posibles.

Cada día, decenas de pacientes de hospitales andaluces recuperan su salud gracias a una transfusión de sangre y sus derivados. Por eso, es imprescindible donar periódicamente, ya que la sangre no puede fabricarse y la única vía es que una persona quiera ceder una pequeña cantidad, de manera voluntaria y altruista.

Las necesidades de sangre diarias varían según la provincia. Por ejemplo, en Sevilla es necesario que, al menos, 200 personas acudan cada día a donar para cubrir las peticiones de sangre generadas desde los hospitales, mientras que Almería y Jaén requieren 95. Huelva, por su parte, necesita que un centenar de personas donen diariamente, Córdoba y Cádiz 140, Granada 150 y Málaga 175.

El perfil del donante de sangre en Andalucía es el de un varón de menos de 30 años que acude a las colectas móviles. Esta proporción cambia entre los nuevos donantes más jóvenes, donde prácticamente la mitad son hombres y la otra mitad mujeres. Las personas de entre 18 y 30 años son las que más donan y suman un 34,8% del total, seguidas por las de entre 31 y 40, que abarcan el 29,8%.