El Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama, incluido en el Plan Andaluz de Oncología, inició su actividad en Andalucía en 1995, logrando detectar un total de 5.166 tumores de este tipo entre las mujeres citadas, aquellas de 50 a 69 años que no hayan padecido esta patología previamente, realizándose una mamografía bilateral cada dos años, que es leída por dos radiólogo.

En caso necesario, para la realización de otras pruebas complementarias, la paciente es derivada al hospital de referencia. Si el resultado es normal, la mujer vuelve al programa para ser citada de nuevo, mientras que si se detecta alguna patología que requiera un seguimiento especial o se diagnostica un cáncer de mama, continuará siendo atendida en el hospital para el tratamiento.

La detección temprana, a través de la realización de mamografías, ha permitido mejorar, en la mayoría de los casos, el pronóstico de la enfermedad y aplicar a las mujeres afectadas tratamientos menos agresivos. En concreto, más del 60% de las mujeres han podido conservar su mama tras la extirpación del tumor. Cuando se inició el Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama sólo en el 20% de los casos la cirugía no era radical.

En este sentido, hay que destacar también que en la actualidad en más del 15% de los casos, el proceso quirúrgico concluye con la reconstrucción de la mama. La edad de las mujeres que se están beneficiando de un abordaje reconstructivo, que como mínimo requiere tres intervenciones pudiendo coincidir una de ellas con el tratamiento quirúrgico del tumor (reconstrucción inmediata), está entre los 40 y los 60 años.