El presidente también ha abordado los planes de ajuste que el Gobierno de España y la Junta de Andalucía están llevando a cabo en cumplimiento de los compromisos europeos por la reducción del déficit público. Griñán ha precisado que Andalucía se ha unido a este esfuerzo "porque lo cree necesario", si bien ha recordado que ha planteado al Gobierno central que los esfuerzos vayan en consonancia con el nivel de endeudamiento de cada comunidad autónoma.

"Hay que exigir más esfuerzo a las de mayor nivel de deuda", ha afirmado, al tiempo que ha recordado que Andalucía debe 1.176 por habitante, mientras que Galicia debe 1.710; Madrid, 1.795; Cataluña, 3.012 y la Comunidad Valenciana, 2.810, según datos del Banco de España.

El presidente ha subrayado que Andalucía se une al esfuerzo de consolidación fiscal con el que se han comprometido los países de la Eurozona, de manera que tras aprobar el Ejecutivo el decreto-ley de retribuciones en el sector público andaluz, elaborará un programa de ajuste del gasto y de impulso económico, que tendrá medidas para la reducción del déficit y para favorecer la reactivación.

De igual manera, Griñán ha reiterado que para Andalucía ha sido una prioridad lograr una cofinanciación de la dependencia por beneficiario real y no teórico. "Andalucía registra un número de beneficiarios superior al de Madrid, Valencia, Castilla y León, Galicia y Murcia juntas a pesar de tener menos de la mitad de la población de la suma de ellas", ha explicado.

Pese al apoyo a los planes de consolidación fiscal, ha expuesto sus dudas sobre los plazos fijados -apenas tres años- para alcanzar los objetivos de corrección del décifit y del endeudamiento. El plazo parece "excesivamente corto para mantener el equilibrio necesario entre el ajuste y la recuperación", según Griñán, para quien "tal vez se esté cortando demasiado drásticamente la posibilidad de seguir desarrollando políticas de estímulo público".