El índice de precios de consumo (IPC) subió en noviembre en Andalucía un 0,5% respecto al mes anterior. En términos interanuales, la tasa de inflación de la comunidad se situó en el 1,7%, igual a la del conjunto de España y una décima por encima de la del mes anterior (1,6%).

En relación al pasado mes de octubre destacan los aumentos en vestido y calzado (5,5%), reflejo de los últimos efectos de la nueva temporada de invierno; transporte (1%), por el aumento de precios de carburantes y combustibles (2%); y vivienda (0,9%), especialmente por la subida de la electricidad, el gas y otros combustibles (2%). Por el contrario, bajaron los costes en hoteles, cafés y restaurantes (-0,7%), por los servicios de alojamiento (-10,2%); y en medicina (-0,4%), debido a los productos, aparatos y equipos médicos (-0,7%).

En comparación interanual, los mayores aumentos se producen en transporte (3,6%), por los precios de carburantes y combustibles (8,2%); vivienda (3%), sobre todo por la electricidad, el gas y otros combustibles (6,3%); alimentos y bebidas no alcohólicas (2,4%), especialmente las frutas frescas (11,4%); y hoteles, cafés y restaurantes (1,8%), principalmente por los servicios de alojamiento (3,3%).

Sólo dos de los doce grupos que conforman el IPC presentan descensos interanuales en la comunidad andaluza: menaje (-0,1%), donde destacan los apartados de textiles para el hogar (-3,1%) y aparatos domésticos (-2,1%); y medicina, por los productos, aparatos y equipos médicos (-1,4%).

La Consejería de Economía y Conocimiento considera que la tasa de inflación de Andalucía se mantiene en noviembre en un nivel moderado y acorde a la media en España y la Zona Euro, todas por debajo del objetivo de estabilidad de precios del Banco Central Europeo (2%). En concreto, la tasa de inflación en Andalucía se sitúa en el 1,7%, una décima superior a la registrada en octubre, igual a la media nacional, y dos décimas por encima de la adelantada por Eurostat para la Zona Euro (1,5%).

El aumento de la tasa de inflación en una décima respecto al mes anterior viene explicado por el repunte de los precios de los productos energéticos, que crecen un 6,6%, dos puntos más que el mes anterior, por la elevación del precio de los carburantes y combustibles (8,2%). Una subida que refleja el aumento del precio del barril de petróleo Brent, cuya cotización alcanzó de media en noviembre su mayor valor desde mayo de 2015, 63,1 dólares, con un incremento del 43,4% respecto al mismo mes del pasado año.

Inflación subyacente

El componente más estructural, la inflación subyacente, que no tiene en cuenta el precio de los alimentos no elaborados ni los productos energéticos, se reduce en una décima en noviembre, para situarse en el 0,7% en Andalucía, una décima inferior a la media nacional (0,8%), y un punto por debajo de la subida del IPC general (1,7%).

En cualquier caso, con la economía creciendo en el entorno del 3%, una inflación del 1,7% y un crecimiento de los salarios pactados en convenio del 1,3%, según la última información disponible de octubre, se constata la pérdida de poder adquisitivo y la necesidad de adecuar los salarios a la situación económica para que no se resienta el consumo y con ello el crecimiento económico.