La presidenta de la Junta, Susana Díaz, ha hecho un llamamiento para que la propuesta de reforma del modelo de financiación autonómica de Andalucía cuente con el respaldo de todo el Parlamento. Díaz ha recordado que el hecho de que las cinco formaciones con representación en la Cámara respalden el proyecto "es la fortaleza en la defensa de los intereses de esta tierra".

En la sesión de control al Gobierno, la presidenta ha señalado que la propuesta rubricada ya por PSOE-A, PP-A, Podemos e IULV-CA, "defiende una idea de España construida desde la igualdad de las personas, no de los territorios", para que "todos los ciudadanos disfrutemos de los mismos derechos y de las mismas oportunidades", algo, ha insistido, que no es posible con el actual sistema y su aplicación.

Díaz ha dejado claro que la defensa de Andalucía requiere trabajar para la comunidad tenga "una financiación justa y adecuada". Por ello, ha explicado, intentará lograr el consenso y que "los representantes públicos sean capaces de llegar a acuerdos", porque de ello depende el bienestar y el proyecto de vida de los andaluces.

El acuerdo alcanzado hasta ahora, ha resaltado, recoge cuatro conceptos: la infrafinanciación de Andalucía, que la población sea el principal indicador, que haya armonización fiscal y un incremento de los recursos. Con respecto a la primera, la presidenta ha advertido de que las liquidaciones del actual modelo han costado a los andaluces 5.522 millones de euros, lo que se habría traducido en una subida del Producto Interior Bruto del 3,8%.  Asimismo, ha recordado, el sistema deja sin cobertura a 220.000 habitantes.

Díaz ha planteado además la necesidad de acabar con el dumping fiscal entre autonomías, "lo que es la mejor manera para construir un país en igualdad", y que Andalucía cuente con 4.000 millones de euros más. "Este acuerdo no era un fin sino un paso en la defensa de Andalucía, para que tengamos la financiación que merecemos, justa y adecuada, que permita que los andaluces disfruten en igualdad con el resto de ciudadanos de los servicios públicos y del crecimiento", ha defendido.

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Regreso a los mercados financieros

La presidenta de la Junta ha señalado que si el Gobierno de España no autoriza de manera "inmediata y urgente" la salida de Andalucía a los mercados para su financiación entenderá "que se quiere de nuevo atropellar y agraviar" a la comunidad. Para Susana Díaz, el Ejecutivo central carece de razones para demorar este permiso.

Según la presidenta, hay "quienes no quieren ver, o no quieren que se vea, que en Andalucía hemos gestionado una crisis económica de manera distinta: creciendo, generando las condiciones para que en el futuro no vuelva a repetirse y garantizando la igualdad de todos los ciudadanos". Ello, además, "cumpliendo con nuestras obligaciones", lo que "genera una imagen de confianza, de estabilidad, lo que es un plus para la inversión".

Díaz ha señalado que "estamos en condiciones de dar el salto económico y social que esta tierra puede protagonizar y no queremos piedras en el camino, porque demasiados palos en las ruedas hemos tenido ya". La presidenta ha reivindicado "la autonomía económica" porque solo así se garantiza, ha dicho, "la economía política".

En este sentido, ha denunciado que el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), un mecanismo de ayuda a la financiación de las comunidades, "se ha utilizado como instrumento para recentralizar e invadir las competencias autonómicas". Andalucía ha pagado en intereses, "a fecha de hoy", ha informado Díaz al Parlamento, 1.042 de los 1.890 millones de euros de intereses por acogerse al mismo. "Algunos dicen que pedir salir a los mercados financieros es la política del agravio; no, es la de la autonomía, la de que nos quiten el estrangulamiento al que nos tienen sometidos y que nos permitan, porque hemos hecho las cosas bien, financiarnos en mejores condiciones y con el ahorro que tengamos en próximos ejercicios destinar el dinero a la creación de empleo, al apoyo al tejido productivo, a los autónomos, a la educación, a la sanidad y a los dependientes", ha explicado.

Muy crítica con el Gobierno central, al que ha acusado de practicar la usura, la presidenta ha hablado de la necesidad de apoyar el Estado del bienestar, ese "que han querido recortar por la vía del sometimiento al FLA".