El consejero de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades, Rogelio Velasco, ha destacado que la economía andaluza ha demostrado ser "más vigorosa" en épocas de expansión, como la de los años 2019 y 2021, y más resistente en épocas de crisis, como fue el ejercicio 2020, en el que el decrecimiento fue menor que el del conjunto nacional. Así lo ha puesto de manifiesto en la Cámara andaluza, donde ha subrayado que, en el cuarto trimestre de 2021, el PIB regional ha registrado un avance interanual del 6,1%, casi un punto por encima de la media nacional (5,2%) y superando en 1,3 puntos la media de la UE (4,8%). Con respecto al trimestre precedente, se evidencia una aceleración del 2,5%, cinco décimas por encima de la estimada para el total de España en el mismo periodo analizado (2,0%).

Con esta subida interanual, el balance del año ha sido de un crecimiento en Andalucía del 5,1%, una décima superior a la media nacional (5%) y cercano a la UE (5,2%). Velasco ha puesto de manifiesto que "este comportamiento continuado de diferencial positivo con España no ocurría desde el año 2000". Atendiendo a los datos, el consejero de Transformación Económica ha asegurado que Andalucía está más cerca de recuperar el nivel de PIB anterior a la pandemia. "La economía andaluza se sitúa al finalizar 2021 a tres puntos de alcanzar el horizonte de prepandemia, correspondiente al cuarto trimestre de 2019; mientras la economía española se coloca a cuatro puntos", ha puntualizado.

Sin embargo, ha explicado que "existen actividades, especialmente las más vinculadas a la interacción social que, pese a haber crecido de manera significativa en 2021, no han podido compensar las fuertes caídas del año anterior". En ese sentido, destacan las ramas de comercio, transporte y hostelería y la de actividades artísticas y recreativas, con un nivel de valor añadido en el tercer trimestre de 2021 de en torno a un 14% por debajo de los niveles de finales de 2019. Significativos son, también, las cifras del turismo internacional que, en Andalucía al igual que en España, descendieron en torno a un 66% por debajo de las del año 2019.

Evolución de los principales indicadores entre 2019 y 2021

Rogelio Velasco ha hecho una radiografía de los principales indicadores de crecimiento en el trienio 2019-2021, asegurando que, en términos de PIB, se ha producido una caída real acumulada del 3,6%, menor que la registrada por la economía española en su conjunto (-4,4%).

En cuanto al mercado laboral, el resultado de los últimos tres años es muy positivo para Andalucía, ya que, según los últimos datos de la EPA, a cierre de 2021 el número de ocupados en la comunidad ha alcanzado la cifra de 3.249.800 personas (dato del cuarto trimestre), "un máximo histórico al finalizar un año", ha apostillado. De esta forma, ha aclarado que no solo se han recuperado los niveles de prepandemia (3.136.040 ocupados en 2019), sino que, comparado con la situación del mercado laboral a finales de 2018 (3.090.300 ocupados), se obtiene un saldo de 159.500 ocupados más, lo que supone un incremento del empleo del 5,2%. Para el mismo periodo, (cuarto trimestre de 2021 frente al de 2018) en España, el alza del empleo ha sido inferior en dos puntos, con el 3,2%.

Este aumento del empleo ha permitido reducir el número de parados en la región, por lo que a finales de 2021 se contabilizaron 821.800 desempleados, la cifra más baja al término de un año en el territorio andaluz desde 2007. Con ello, la tasa de paro en Andalucía se ha situado al cierre del pasado año en torno al 20%, siendo la más baja desde 2008.

En lo que respecta al tejido empresarial andaluz, a principios de 2021 el número de empresas registradas alcanzaba su máximo histórico con 531.160 entidades, lo que supone un aumento de 12.628 firmas con respecto a principios de 2019, (un 2,4% más), en un contexto de práctico estancamiento en España (0,1%). De esta forma, el peso relativo del tejido empresarial andaluz en España ha aumentado en medio punto, representando el 15,8% del total a nivel nacional, lo que supone otro máximo histórico.

De igual forma, también se ha centrado en la densidad empresarial, que según ha dicho, ha crecido en Andalucía con una ratio el pasado año de 62,7 empresas por cada 1.000 habitantes, un punto por encima de su nivel a principios de 2019, y ello en un contexto en el que la media española ha descendido del 71,5 a principios de 2019 a 71 en 2021.

En su comparecencia, también ha expuesto que los mayores incrementos del tejido empresarial se han producido en los estratos de empresas de mayor dimensión, "lo que favorece la configuración de un sistema más sólido y competitivo". De esta forma, las firmas de entre 200 y 1.000 asalariados han aumentado un 7,4% en la región entre 2019 y 2021, y un 10,1% las que exceden de esa horquilla.

El consejero ha llamado la atención sobre que "estos resultados se obtienen en un escenario económico condicionado por la pandemia y francamente adverso, lo que confirma un cambio de tendencia en Andalucía que, en la anterior crisis, 2008-2013, llegó a perder casi 54.000 empresas", ha aseverado.

Por otra parte, ha reseñado que, en el ámbito de las relaciones económicas internacionales, el territorio andaluz ha mejorado "notablemente" su posición exterior. Así, en estos tres últimos años, la comunidad ha experimentado un gran dinamismo exportador que ha permitido invertir su balanza comercial desde una posición deficitaria en 2018 (-222,4 millones entre enero-noviembre) a otra de superávit en 2021 (1.364,7 millones para el mismo periodo). Y ello en contraste con el déficit de la balanza española (-20.836 millones hasta noviembre).

Con datos del pasado mes de noviembre, las exportaciones andaluzas al extranjero alcanzaron un máximo histórico de 31.371 millones, cifra que supera en más de 1.800 millones el resultado obtenido en el mismo período en 2018 y que convierte a Andalucía en la tercera región más exportadora de España.

Previsiones para 2022

Rogelio Velasco ha incidido en los riesgos observados desde el cuarto trimestre de 2021 que están condicionando la recuperación global de la economía a nivel mundial y la de Andalucía. Entre ellos, se ha referido a la expansión de la variante ómicron, los cuellos de botella en las cadenas globales de suministros, el alza sustancial de las tasas de inflación, los aumentos de los costes de transporte a nivel internacional o el conflicto de Ucrania.

También ha hecho alusión al retraso en la asignación y ejecución de los fondos Next Generation, alertando que "sus efectos multiplicadores en la actividad económica podrían quedarse en 2021 por debajo del 40% de lo anunciado, reduciendo así el impulso potencial sobre el PIB".

Según ha indicado, ese escenario ha llevado a la mayoría de organismos nacionales e internacionales a revisar a la baja sus pronósticos de crecimiento. En el caso de la economía regional, ha añadido que "igualmente podría conducir a una reconsideración de las estimaciones de la Junta realizadas a principios de octubre". En cualquier caso, ha apuntado a la necesidad de ser prudentes y esperar a ver la evolución de los indicadores en los primeros meses del presente año para comprobar si se confirma o no la trayectoria de aceleración del crecimiento que ha reflejado el PIB en el último trimestre de 2021.

No obstante, ha afirmado que este 2022 será "un año crucial para la recuperación económica", por ello, ha asegurado que el Gobierno andaluz continuará aplicando su agenda reformista, con políticas a favor de la simplificación administrativa, el apoyo a los sectores productivos y la atracción de inversiones".