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Educación

Los programas contra el fracaso escolar mejoran la tasa de promoción del alumnado hasta el 95%

Educación analiza los programas de Refuerzo educativo estival, Impulsa y PROA, con la participación de más de 364.000 estudiantes

Los programas de refuerzo impulsados por la Consejería de Educación y Deporte para luchar contra el fracaso escolar han mejorado la tasa de promoción del alumnado participante de manera continuada hasta el 95%, incrementándose en ocho puntos. Estos datos se desprenden del estudio realizado por la Consejería que se enmarca en el Plan estratégico de evaluación educativa para el periodo 2021-2027, que tiene como finalidad la mejora de los procesos evaluativos en el ámbito educativo con el objetivo de aumentar el éxito de todo el alumnado y la calidad del sistema. Este informe ha sido conocido por el Consejo de Gobierno.

En concreto, la Consejería ha evaluado el Programa de refuerzo educativo en periodo estival, con la finalidad de contribuir a reducir el fracaso escolar y ofrecer una alternativa pública de refuerzo educativo y de conciliación accesible a las familias andaluzas durante el verano; el Programa de refuerzo, orientación y apoyo (PROA), que busca mejorar los índices de éxito escolar y garantizar la permanencia del alumnado en el sistema educativo, y el Programa Impulsa, para paliar y prevenir el fracaso y el abandono escolar temprano del alumnado andaluz, así como favorecer el éxito educativo. Más de 364.000 alumnos han participado en estas iniciativas en los cursos 2018/19, 2019/20 y 2020/21.

Otro de los datos que aporta el documento es que los estudiantes con necesidades educativas especiales se benefician en la misma medida que lo hace el alumnado general en cuanto a la tasa de promoción. De esta manera, destaca la importancia y utilidad de los programas como herramientas para garantizar la igualdad de oportunidades en la educación.

Respecto a la nacionalidad del alumnado, el informe considera que, de todos los grupos y perfiles, aquellos estudiantes que poseen una nacionalidad distinta a la española son en los que más se aprecia el efecto que tiene la aplicación continuada de estos programas. Siendo el grupo más vulnerable, con una tasa promedio de promoción del 77% cuando inician el primer programa, logran llegar hasta una tasa promedio del 97% (20 puntos más de diferencia), lo que supone el porcentaje de promoción más alto.

Niños realizando sus tareas escolares.
Niños realizando sus tareas escolares.

El efecto de la aplicación continuada de los programas de refuerzo también se observa en la tasa de aprobados de las competencias claves, especialmente en Matemáticas y Lengua Castellana y Literatura. En el caso de Matemáticas, el alumnado que solo completó un programa de refuerzo logró una tasa de aprobado del 57% que aumenta de forma gradual hasta alcanzar el 87% de aprobados, una vez se completa la mayoría de los programas de refuerzo en los tres cursos escolares. Este patrón de ascenso en Matemáticas se mantiene constante para todos los perfiles y grupos analizados -alumnos o alumnas con y sin necesidades especiales y de nacionalidad española o extranjera-. Destaca el caso del alumnado no español, que parece ser el grupo que más beneficio logra de los programas de refuerzo.

Para Lengua Castellana y Literatura la diferencia en la tasa de aprobados entre el alumnado que solo completó un único programa de refuerzo y el que completó la mayoría de los programas es de 8 puntos porcentuales. Así los primeros obtuvieron un promedio de aprobados del 80%, mientras que los segundos alcanzaron el 88%. El patrón de ascenso en la tasa de aprobados en Lengua Castellana y Literatura es constante para dos grupos específicos: alumnado con necesidades educativas especiales y no español, que obtiene tasas de aprobados superiores a medida que se incrementa el número de programas. Para el resto de grupos, la tendencia es positiva.

Por otra parte, la evaluación que hace la comunidad educativa es muy positiva de todos los programas. Así, el alumnado de Primaria valora con un 9,5 el Programa de refuerzo estival. Las familias y los docentes califican con un 8,8 y un 8,9, respectivamente, el PROA.