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Cultura

Arte infinito sobre el papel en el CAAC

Una exposición del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo demuestra la versatilidad de este soporte como base de creación artística

Pulpa de madera, algodón, cáñamo e incluso lino son las materias primas de las que se extraen las fibras de celulosa que conforman el papel, un soporte utilizado desde la Antigüedad como base del pensamiento, la lógica, el razonamiento y el arte.

La obra sobre papel se ha asociado tradicionalmente al dibujo en sus diferentes variantes; a aquello que requiere lo inmediato o, por el contrario, a la necesidad de pensar y ensayar por medio del boceto. Sin embargo, en las últimas décadas, el papel como soporte artístico se ha ido expandiendo, adentrándose en otros campos como lo instalativo, lo pictórico o, incluso, lo escultórico, demostrando las posibilidades casi infinitas tanto para el arte como para sus creadores.

Y, precisamente, ese es el objetivo de la exposición 'Sobre el papel', que puede visitarse hasta el 5 de marzo en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC). Una muestra que reúne obras en diferentes formatos de veinte artistas nacionales e internacionales incorporadas a la colección permanente del museo de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte mediante adquisiciones o donaciones durante la última década.

Una serie de pinturas en temple vinílico sobre papel en la que predominan los tonos albero, blancos y dorados da la bienvenida a la exposición en la que nombres como los de Concha Jerez, Guillermo Pérez Villalta, Soledad Sevilla, Juan Suárez o Louise Bourgeois muestran la gran variedad de posibilidades estéticas y formales que ofrece el trabajo sobre este medio.

A la instalación de la artista londinense Rosalind Nashashibi que puede admirarse en primer lugar le siguen sendos dibujos realizados en tinta china sobre papel de Eva Lootz, un grabado de Cristina Iglesias, realizado en carborundo sobre papel y perteneciente a una de sus series más conocidas y productivas -la que desarrolló desde los años 90 sobre habitaciones y laberintos vegetales- y tres piezas de tinta china sobre papel de Mar García Ranedo.

De la artista Raquel Serrano se puede ver una serie compuesta por tres dibujos en grafito sobre papel, representaciones de representaciones en distintas variaciones de claroscuro. Técnica mixta sobre papel es la propuesta de la pintora Ruth Morán, mientras que una acuarela en papel en gran formato de Abraham Lacalle preside la gran sala rectangular.

Del desaparecido grupo The Richard Channin Foundation se presentan en la misma sala cinco piezas, todas realizadas con rotulador sobre papel. Este colectivo supuso el pistoletazo de salida para la penúltima hornada de artistas de Sevilla, hoy creadores de mediana carrera consolidados. Formado por Miki Leal (Sevilla, 1974), Juan del Junco (Jerez de la Frontera, 1972) y Fernando Clemente (Jerez de la Frontera, 1975), se desarrolló entre 1999 y 2004. Todos los dibujos de este grupo se realizaron durante la primavera de 2002 y descubren una nueva faceta de la Channin, que los elabora de seguido en un mismo día casi como si se tratara de un ejercicio de terapia colectiva destinado a fortalecer la dinámica creativa del grupo, que en esas fechas no pasaba precisamente por su mejor momento. Los dibujos que se presentan corresponden a distintas series que tienen en común el tema principal, las caras de los componentes del colectivo, un patrón que reiteran habitualmente cambiando su posición y distribución sobre la superficie del papel y que revela su pronunciado narcisismo. De manera individual también podemos contemplar en esta muestra la obra de Miki Leal con dos piezas realizadas en acrílico sobre papel.

Obras en grafito y de pequeño formato contrastan con piezas de grandes dimensiones y llenas de color.
Obras en grafito y de pequeño formato contrastan con piezas coloridas de grandes dimensiones.

Por primera vez se exhiben cuarenta acuarelas sobre papel de José Manuel Broto, todas ellas dibujos preparativos de la serie que el artista creó en 1991 para la exposición "Al aire de su vuelo", en el CAAC, conmemorativa del IV centenario de la muerte del poeta San Juan de la Cruz. La serie se compone de 13 lienzos de gran formato (300 x 260 cm cada uno), que fueron realizados teniendo en cuenta las dimensiones de las salas del Pabellón Mudéjar de Sevilla, primera sede de exposiciones del museo de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte.

Cuatro acuarelas sobre papel del pintor Alfonso Albacete; una serie de 96 dibujos realizados en acrílico sobre papel y de 96 recortes de prensa intervenidos de Inmaculada Salinas; una obra realizada en bolígrafo de colores sobre papel de colores de Ignasi Aballí o tres dibujos –un grabado a la punta seca, un pastel, tinta, lápiz e hilo sobre papel y un gouache sobre papel- de Louise Bourgeois, considerada una de las creadoras más influyentes de los siglos XX y XXI, componen la parte central de esta exposición.

Guillermo Pérez Villalta, uno de los artistas más representados en la colección del Centro gracias al legado del propio autor, también forma parte de esta muestra, en la que se exhiben once grafitos sobre papel en los que destacan los desnudos masculinos, tema recurrente en su obra, siendo algunos de ellos bocetos para posteriores pinturas. Junto a ellos, su Autorretrato con hepatitis, en el que Villalta se muestra idealizado, recordando la tradición grecolatina.

Soledad Sevilla, premio Velázquez de Artes Plásticas, presenta la obra 'Mas tarde', de 1982, realizada en cera sobre papel mientras que del artista gaditano Juan Suárez se muestran 18 pinturas industriales sobre cartulina en las que llama la atención el color y el material empleado: pintura industrial de fuertes tonalidades sobre papel fluorescente.

Una de las pioneras del performance en España, Concha Jerez, distinguida con los premios Nacional de Artes Plásticas y Velázquez, presenta en esta exposición un collage de Rotring negro y lápiz y Stabilo rojo sobre papel, en una de las primeras obras conceptuales realizadas por la autora en 1974 y que surge como reacción al régimen franquista. Los seis dibujos están integrados por escritos ilegibles autocensurados y cada uno de ellos tiene una línea en forma de flecha roja realizada a mano.

Dos obras de grafito sobre papel S/T del andaluz Antonio Rodríguez Luna son muestra de porqué el papel fue siempre el mejor soporte del pensamiento, sobre todo para una época ideológicamente tan intensa como los años 20 y 30 del pasado siglo en España; los dibujos y las obras seriadas, como carteles, grabados y revistas, resultan de capital importancia para conocer la vanguardia histórica en nuestro país.

Por último, las obras de José Luis Castillejo ocupan el largo corredor con las 88 páginas de "La caída del avión en el terreno baldío", 1967. Escritor experimental o, como él mismo prefería llamarse, un escritor moderno, la obra de Castillejo es imprescindible para entender el complejo campo expandido en que se ha convertido la práctica de la escritura contemporánea y su conexión con otros ámbitos artísticos como la pintura. El grupo Zaj fue una importante iniciativa precursora de esta experimentación en España. Lo fundaron en Madrid en 1964 los compositores Juan Hidalgo, Walter Marchetti y Ramón Barce con la idea de desbordar los límites de la música mediante espectáculos que denominaron de "teatro musical", de "música de acción" y, más adelante, simplemente "conciertos Zaj". El encuentro entre Castillejo y Zaj en 1966 fue decisivo. Para él representó el impulso que necesitaba para adentrarse en el terreno de la creación. Para el grupo supuso una importante aportación a la ampliación de los límites del arte.