La consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha destacado la importancia de la transparencia como un "indicador indispensable para la calidad, la credibilidad y la legitimidad democrática" de un Estado, y ha defendido la necesidad "inexorable" de transformar la administración pública para convertirla en una "organización con paredes de cristal".

Así se ha manifestado durante la inauguración del seminario 'Administración electróncia y control-análisis de las buenas prácticas' que se desarrolla en Sevilla, organizado por la Organización Europea de Instituciones Regionales de Control Externo (EURORAI) y la Cámara de Cuentas de Andalucía. Durante su intervención, ha compartido la importancia de esta convocatoria para "debatir, aprender y compartir experiencias" que posteriormente serán aplicadas en las administraciones. "Una labor de extraordinaria importancia para recuperar la confianza de los ciudadanos en sus administraciones y legitimar el valor de las políticas públicas", ha subrayado.

Montero ha recordado que las administraciones públicas históricamente han estado orientadas únicamente a la eficacia, "a la consecución de objetivos a cualquier coste", sin un compromiso con la rendición de cuentas y el control del gasto público. Sin embargo, ha reconocido que "después de la crisis que nos ha azotado", la sociedad actual es mucho más crítica, participativa y exigente. "La ciudadanía está mucho más formada e informada y reclama saber qué se hace con lo que se recauda por sus impuestos y también es consciente de que el funcionamiento de la administración tiene una influencia muy notable en el funcionamiento de la economía, dado el peso que ha alcanzado el sector público respecto al PIB".

Por ello, ha defendido la necesidad de "establecer nuevos sistemas de asignación de recursos, de evaluación de políticas y de control de la gestión; y todo ello con absoluta transparencia". En este contexto, ha destacado que el desarrollo de la administración electrónica permite avanzar en los objetivos de aumentar la calidad, la eficiencia y la accesibilidad de los servicios públicos, consolidar la rendición de cuentas y el control del gasto, y agilizar las relaciones con la ciudadanía.

"Estamos convencidos de que ha de ser así, de que únicamente una administración que rinde cuentas ante la ciudadanía se legitima ante ella, le da motivos para seguir creyendo en los servicios públicos, en su legítima conquista, y le da motivos para seguir validando el estado del bienestar. Y esto es crucial en tiempos como los actuales", ha manifestado.

Montero ha compartido los datos que proporciona la ONG Transparencia Internacional, que en su último informe otorga a Andalucía una puntuación global de 96,3 puntos, por encima de la media nacional que se sitúa en 94 puntos, alcanzando 100 puntos en Derecho de acceso a la información. No obstante, ha indicado que la transparencia debe ir más allá de la mera interacción con la ciudadanía para dar soporte a la gestión interna de la Junta de Andalucía, "agilizando sus procesos y mejorando la prestación de los servicios públicos".

La consejera ha detallado algunos de los programas que ya se están desarrollando en Andalucía para "afrontar los grandes retos tecnológicos" como el nuevo Sistema de Gestión Integrada de Recursos, GIRO, puesto en marcha en 2015, con el fin de modernizar la gestión contable y presupuestaria de la Junta. Asimismo, se han implantado el punto general de entrada de facturas electrónicas de la Junta, el Registro Contable de Facturas o el Registro electrónico de la administración que permiten aprovechar las economías de escalas y gestionar toda información generada por una administración del tamaño de la andaluza.