La Junta de Andalucía, a través de la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, va a reforzar el compromiso que desde 2005 viene manteniendo con la Comisión Fulbright en España, el órgano encargado de gestionar en España el programa de ayudas Fulbright.

Con este fin, el Gobierno andaluz aumentará de cinco a siete las becas patrocinadas destinadas a andaluces en el marco de estas ayudas de excelencia, que cuentan con un sello de calidad indiscutible a nivel mundial y que superan, de media, los 76.000 euros por beneficiario.

Hasta este momento, se patrocinaban un máximo de cinco becas de ampliación de estudios destinadas a jóvenes titulados superiores andaluces interesados en completar su formación con programas de postgrado en Estados Unidos. A partir de la convocatoria en curso -pendiente aún de resolverse-, las ayudas patrocinadas por el Ejecutivo autonómico pasarán a un máximo de siete, destinándose cinco de ellas a sufragar programas de máster o doctorado y dos, a estancias de investigación predoctoral en Estados Unidos.

La colaboración entre la Junta y la Comisión Fulbright se remonta al año 2005, más de una década y media de cooperación en la que la administración regional ha venido impulsando la formación de jóvenes andaluces en centros de prestigio internacional a través de este programa. Desde que se iniciara esta colaboración, Andalucía ha financiado la formación de un total de 48 beneficiarios con más de 3,6 millones de euros.

Entre ellos, se contabilizan una veintena de mujeres y veintiocho hombres, la inmensa mayoría de los cuales (más del 70%) eligió cursar estudios de máster. Entre las universidades escogidas para ello figuran algunas de las que actualmente ocupan los 100 primeros puestos mundiales del ranking de Shanghai, como las de Columbia, Chicago, Harvard, Boston, Southern California o la de Ohio, entre otras.

La apuesta por la excelencia, y en especial por la formación avanzada y de calidad para los jóvenes andaluces, constituye una de las líneas estratégicas del actual Ejecutivo regional, y entra dentro de los ámbitos de actividad de la Agencia Andaluza del Conocimiento –organismo dependiente de la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad-, que desde 2013 es la entidad colaboradora encargada de la gestión en Andalucía del programa Fulbright.

La apuesta de la comunidad por un capital humano formado y altamente capacitado, y que sepa hacer frente a los retos futuros que se presentan, es primordial dada la necesidad de profesionales que se adapten a las nuevas demandas de los mercados y de entornos y economías globales y en continuo cambio.

La estrategia del actual Gobierno incluye una apuesta firme y un compromiso con el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), un sistema público de universidades y la internacionalización de los estudiantes a través de programas específicos como el propio programa Fulbright, las becas Erasmus o el programa Talentia en sus distintas variantes.

Las becas Junta de Andalucía-Fulbright van dirigidas a graduados vinculados a Andalucía, con titulación superior y conocimiento de inglés demostrable, que aspiren a obtener un título de máster o doctorado. En el caso de las dos nuevas ayudas proyectadas, éstas irán dirigidas a titulados que cursen el doctorado en universidades andaluzas y estén interesados en realizar una estancia de investigación en Estados Unidos, con una duración mínima de 6 meses y máxima de 12 no prorrogables.

Apuesta por la excelencia

Creado en EEUU en 1946, el programa Fulbright se ha extendido ya a más de 150 países, en 49 de los cuales se han firmado acuerdos binacionales mediante los que se crean comisiones bilaterales para la gestión de estas becas, que son sinónimo de excelencia y cuentan con un sello de calidad indiscutible. El programa obtuvo el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en el año 2014.

En España, la Comisión Fulbright se creó en 1958 y desde ese año ha otorgado más de 9.000 becas a ciudadanos españoles y estadounidenses para que fueran al otro país a estudiar, investigar, conocer su cultura y transmitir la propia, siendo verdaderos exponentes de lo que se denomina "diplomacia pública".