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Salud

Activado el Plan de Alta Frecuentación ante el aumento de la demanda en urgencias en invierno

El Consejo de Gobierno aprueba esta estrategia que prevé acciones organizativas y de gestión de recursos en centros sanitarios

El Consejo de Gobierno ha aprobado el Plan de Alta Frecuentación que la Consejería de Salud y Familias va a poner en marcha en los centros sanitarios para abordar de manera coordinada los incrementos habituales de la demanda asistencial urgente durante los meses de invierno. Su objetivo principal es dar respuesta al incremento de esa demanda y aumentar la calidad asistencial a los pacientes.

Para su puesta en marcha, se ha creado una comisión que marcará las líneas estratégicas a seguir y su activación en el momento en que sea necesario, en coordinación con los equipos de dirección de los distritos y áreas sanitarias y de los hospitales.

Aunque la situación actual de la pandemia por Covid-19 en Andalucía es menos compleja que el año pasado gracias al alto porcentaje de vacunación o inmunización natural de la población, la Consejería ha decidido activar dicho plan como principio de precaución ante la posible confluencia en el tiempo invernal entre el coronavirus SARS-CoV2 y el virus de la gripe. Esta posible confluencia puede favorecer la aparición de situaciones asistenciales en las que al aumento de la demanda se una un incremento de complejidad de los pacientes asistidos, teniendo también en cuenta la descompensación de la patología crónica por otros virus respiratorios.

Fundamentalmente, las personas que más acuden a los servicios de urgencias son pacientes mayores aquejados por patologías crónicas (bronconeumopatías, insuficiencia cardíaca, diabetes, cardiopatía isquémica) y, en general, pacientes pluripatológicos cuyas enfermedades de base se descompensan con el frío y los virus circulantes.

El Plan de Alta Frecuentación contempla la monitorización diaria y por turno de la afluencia de pacientes a las urgencias de Atención Primaria y Hospitalaria, de modo que puedan tomarse las medidas necesarias para atender al incremento de la demanda.

Los centros sanitarios públicos están preparados para atender el incremento de la demanda en urgencias, si bien, hay que incidir en que no se puede conocer con exactitud en qué día exacto o centro concreto se va a producir un incremento exponencial del número de pacientes. En cualquier caso, el sistema de triaje permite priorizar la atención a los pacientes en función de la gravedad, de forma que, a pesar de que haya un incremento del número de personas que acuden a las urgencias, el sistema identifica y prioriza a los pacientes más graves.

El plan establece unas líneas estratégicas para los hospitales y los distritos sanitarios del SAS, de forma que puedan ofrecer una respuesta eficaz y coordinada ante un previsible aumento de la demanda asistencial. Este plan se adapta a las circunstancias de cada año por los equipos directivos y profesionales de todos los centros sanitarios públicos.

Parámetros y niveles de activación

En el caso de los centros hospitalarios, el plan contempla la monitorización de varios parámetros: criterios epidemiológicos, de ocupación del área de Observación, de la UCI y de hospitalización, de la frecuentación en urgencias y del porcentaje de pacientes atendidos que se ingresan en hospitalización. Teniendo en cuenta estos índices se establecen cuatro niveles de actuación para los hospitales:

La fase 0, cuando el porcentaje de pacientes Covid-19 ingresados en hospitalización y UCI es menor del 5% y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea menor de 10% durante 3 días consecutivos.

La fase I, cuando el porcentaje de pacientes Covid-19 ingresados en hospitalización y UCI se sitúa entre el 5% y el 25% y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea del 10% durante 3 días consecutivos y/o haya un incremento del 15% en el porcentaje de pacientes que pasan a observación y/o ingresan.

La fase II, cuando el porcentaje de pacientes Covid-19 ingresados en hospitalización y UCI se sitúa entre el 25% y el 50% y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios se sitúe entre el 10% y el 25% durante 3 días consecutivos y/o haya un incremento del 15%-30% en el porcentaje de pacientes que pasan a observación y/o ingresan.

La fase III, cuando el porcentaje de pacientes Covid-19 ingresados en hospitalización y UCI sea superior al 50% y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea superior al 25% durante 3 días consecutivos y/o haya un incremento superior al 30% en el porcentaje de pacientes que pasan a observación y/o ingresan.

En función de estos datos, se ponen en marcha las medidas previstas que permiten a los centros sanitarios atender la actividad asistencial urgente.

En el caso de los centros de Atención Primaria también se establecen cuatro niveles de actuación basados en criterios epidemiológicos, de frecuentación en centros, servicios de urgencias y atención domiciliaria.

La fase 0, cuando haya menos de 3 casos sospechosos o confirmados Covid-19 por equipo médico/enfermera en los últimos 14 días y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea menor de 10% durante 3 días consecutivos.

La fase I, cuando haya menos de 5 casos sospechosos o confirmados Covid-19 por equipo médico/enfermera en los últimos 14 días y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea menor de 10% durante 3 días consecutivos y además se produzca un aumento del 15% en el resto de los parámetros.

La fase II, cuando haya entre 5 y 10 casos sospechosos o confirmados Covid-19 por equipo médico/enfermera en los últimos 14 días y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea entre el 10% y el 25% durante 3 días consecutivos y además se produzca un aumento de entre el 15% y el 30% en el resto de los parámetros.

La fase III, cuando haya más de 15 casos sospechosos o confirmados Covid-19 por equipo médico/enfermera en los últimos 14 días y la afluencia en urgencias de patologías Covid, no Covid y procedentes de virus respiratorios sea superior al 25% durante 3 días consecutivos y además se produzca un aumento de más del 30% en el resto de los parámetros.

En función de estos datos, se ponen en marcha las medidas previstas que permiten a los centros sanitarios atender la actividad asistencial urgente.

Además, el plan incluye la creación de comisiones de seguimiento y coordinación de todos los servicios implicados en la atención a los pacientes urgentes, así como la obligación de informar a la ciudadanía sobre los dispositivos a los que deben acudir en caso necesario y la importancia de un uso adecuado de los recursos de urgencias.

Red de Vigilancia Centinela

La Consejería de Salud y Familias realiza un seguimiento de la incidencia de la gripe a través del Sistema de Vigilancia de Gripe de Andalucía, formado por una red de médicos centinelas pertenecientes a todos los distritos y áreas de gestión sanitaria de Andalucía, y un laboratorio de referencia situado en Granada con capacidad para detectar virus gripales. En concreto, esta red está integrada por 120 profesionales sanitarios, entre médicos y pediatras de Atención Primaria que participan voluntariamente en la notificación de datos individualizados, epidemiológicos y virológicos, de los casos sospechosos.

En la temporada 2020-2021, tanto a nivel europeo, nacional, como en Andalucía, la vigilancia centinela de gripe en Atención Primaria se ha ampliado a una vigilancia centinela de infección respiratoria aguda (IRA), que incluye al virus de la gripe, al virus Sars-Cov2, VRS y la posibilidad de incluir otros virus que sean de interés en sucesivas temporadas.