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Neumólogos del Reina Sofía aconsejan no abandonar el tratamiento en el Día Mundial del Asma

La alta incidencia de esta enfermedad ha motivado que en torno el lema “El impacto del asma” giren todas las actividades organizadas para este día

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Los neumólogos del Hospital Universitario Reina Sofía hicieron hincapié hoy, con motivo de la celebración del Día Mundial del Asma, en la necesidad de seguir el tratamiento y no abandonarlo como el mejor modo de controlar esta enfermedad que se encuentra entre las diez más frecuentes en nuestro país y se define como una patología inflamatoria crónica de origen genético caracterizada por problemas respiratorios recurrentes y síntomas como fatiga, pitos o silbidos al respirar, tos y otros.

La alta prevalencia de esta enfermedad ha motivado el lema con el que la Organización Mundial de la Salud ha organizado las actividades conmemorativas de este año El impacto del asma, pues afecta a entre el 8 y el 10 por ciento de la población española y esta incidencia se duplica en el caso de los niños.

Además, la Iniciativa Global para el Asma (GINA) de la OMS ha desarrollado cinco recomendaciones para difundir este día entre los asmáticos como son solicitar al médico un tratamiento personalizado por escrito, tomar los medicamentos prescritos por el facultativo, evitar los factores que pueden desencadenar las crisis, aprender a reconocer los síntomas de dichas crisis y saber qué hacer en dichos casos.

En este sentido, el neumólogo del Reina Sofía Javier Cosano indicó que, a pesar de registrarse una elevada prevalencia de esta enfermedad, la mayoría de los pacientes son asmáticos leves que, “para que todo vaya bien” y desarrollen su actividad normal, requieren de un tratamiento continuado y de un control “que evite el empeoramiento de la enfermedad”.

Así, este facultativo incidió en la conveniencia de completar los planes de tratamiento que permiten educar a los pacientes para que lleven un autocontrol de su enfermedad porque, al saber detectar los síntomas y tratarlos, pueden llevar una vida normal.

Entre los principales aspectos a cuidar, el doctor Javier Cosano destacó que hay que evitar el contacto con alergenos, irritantes ambientales, humos, productos químicos y otros factores desencadenantes, así como cumplimentar un tratamiento antiinflamatorio permanente y usar broncodilatadores cuando sea necesario.

Sin miedo a los inhaladores

En esta línea, a pesar de que no hay tratamientos curativos, existe un arsenal de medicamentos como son corticoides inhalados, fundamentalmente, y también nuevos fármacos conocidos como antileucotrienos, que se administran por vía oral y se usan como sustituto de los corticoides inhalados o complementan a éstos cuando se pretenden aumentar los efectos sin subir la dosis.

Por su parte, el doctor Luis Manuel Entrenas, también del Servicio de Neumología del complejo sanitario cordobés, señaló que “hay que perder el miedo a la medicación”, especialmente a los corticoides inhalados, pues algunos enfermos los asocian con efectos negativos erróneos y acaban por abandonar el tratamiento cuando no se encuentran asintomáticos. Además, el neumólogo también desmintió la falsa creencia de que los asmáticos no puedan hacer deporte.

La Unidad de Asma del Reina Sofía, que atiende anualmente a unos 2.000 pacientes y que supone las dos terceras partes de las consultas del Servicio de Neumología, incluye un programa especial sobre el autocontrol de esta enfermedad que ofrece un tratamiento personalizado e integral con el que se ha conseguido “que acudan menos asmáticos a Urgencias porque conocen mejor su enfermedad y la tratan adecuadamente”.
Finalmente, se estima que el asma origina un coste total aproximado en España de 2.200 euros por paciente y año. Además es una enfermedad que está infradiagnosticada, pues se calcula que sólo se conoce en nuestro país la mitad de los casos y la adhesión al tratamiento ronda entre el 30 y el 50 por ciento.

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