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El Reina Sofía recibe un ludomóvil para estimular el juego entre unos 1.000 niños cada año

Este equipo, donado por la industria farmacéutica Pfizer, reúne 90 juegos en un soporte fácil de trasportar y pensado para niños que tienen dificultad para salir de sus habitaciones

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El Hospital Universitario Reina Sofía ha recibido del laboratorio farmacéutico Pfizer un equipo conocido como ludomóvil que sirve para estimular el juego en el ámbito hospitalario especialmente entre los niños que por su situación clínica se ven obligados a desarrollar las actividades lúdicas propias de su edad dentro de la habitación del centro sanitario.

Los 90 juguetes, juegos y recursos lúdicos que contiene el ludomóvil pasarán cada año por las manos de unos 1.000 pequeños ingresados en el hospital cordobés. Este material ofrece la posibilidad de realizar manualidades, actividades de ensamblaje y miniaturas, dispone de una pizarra magnética, puzzles, libros y otros materiales que contribuyen a que su estancia sea lo más agradable posible y a eliminar el estrés y el miedo que el ingreso hospitalario puede provocar en ellos.

Estos instrumentos también ayudan a que el niño comprenda su enfermedad y coopere en el seguimiento de su tratamiento, se reduzca su percepción de dolor físico y los comportamientos negativos (gritos, llantos, pataletas) y se cree una atmósfera más similar a del ambiente familiar. En el proceso de fabricación y elección de los juguetes se ha tenido en cuenta su capacidad para favorecer sentimientos de autoestima, que sean divertidos, estimulen la relajación y concentración y promuevan la creatividad.

El ludomóvil, que ha sido diseñado por el Instituto Tecnológico del Juguete en colaboración con la Facultad de Psicología de la Universidad de Valencia, se presenta en un soporte compacto en forma de carro que recoge todo el material que se utiliza en servicio de préstamo a niños de 0 a 14 años, pesa unos 65 kilogramos, mide 143 centímetros de largo, 58 de ancho y 104 de alto y los materiales son estructuras metálicas con complementos de madera y plástico.

El Reina Sofía lo recibió a principios de este año dentro de una campaña nacional de donación en la que se entregaron ludomóviles a trece hospitales españoles, entre los que se incluye además del hospital cordobés tres centros pertenecientes el Sistema Sanitario Público Andaluz (el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, Virgen de las Nieves de Granada y Carlos Haya de Málaga).

Para los más aplicados, esta original ludoteca móvil también incluye un soporte de madera que sirve de escritorio para el ludotecario, recipientes de plástico, bolígrafos y otros materiales de papelería y una rejilla en la parte posterior pensada para colocar los archivadores que contienen documentación necesaria para la gestión del servicio de ludoteca.

Esta iniciativa partió de la imposibilidad de instalar ludotecas en los hospitales por falta de espacio y también de las exigencias de la terapéutica oncológica (goteros, problemas inmunológicos) que condiciona e impide que un gran número de niños puedan acudir a una sala de juego.

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