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Alrededor de 200 pacientes han pasado por la nueva escuela del hombro del Hospital Reina Sofía en 2007

Esta iniciativa, que desarrollan los profesionales del servicio de Rehabilitación del complejo sanitario, permite que los pacientes tomen conciencia de su patología y conozcan las principales medidas preventivas para evitar recaídas

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El Hospital Universitario Reina Sofía ha puesto en marcha este año un nuevo servicio, la escuela del hombro, por la que ya han pasado unos 200 pacientes diagnosticados de hombro doloroso no traumático que han recibido información básica sobre la patología que padecen y consejos para evitar recaídas.

Esta iniciativa, que llevan a cabo los profesionales del servicio de Rehabilitación del hospital, permite que los pacientes puedan recibir tratamiento rehabilitador rápidamente tras el diagnóstico de hombro doloroso no quirúrgico. En esta línea, la práctica temprana de determinados ejercicios físicos contribuye a reducir el daño en los tendones y, en general,  mejora la sintomatología y resulta eficaz a corto y medio plazo.

El hombro doloroso no traumático abarca fundamentalmente la patología del manguito y el síndrome subacromial, enfermedades muy frecuentes e invalidantes entre la población. Alrededor del 12% de las consultas que se atiende en el servicio de Rehabilitación del hospital cordobés es por estas patologías, que se suelen asociar a problemas de artrosis en personas a partir de los 45 años y, en pacientes más jóvenes, a motivos laborales asociados a sobreesfuerzo del hombro.

Cinco sesiones

Los pacientes asisten a una media de cinco sesiones de formación en el marco de esta escuela del hombro repartidos en grupos de cinco a seis personas. Las clases tienen lugar de lunes a viernes en horario de tarde y se programan dos sesiones diariamente para atender la demanda existente.

La primera visita a la escuela consiste en una sesión teórica para conocer la anatomía del proceso, consejos sobre higiene postural, las técnicas de los principales ejercicios que posteriormente van a desarrollar, se despejan todas las dudas y se les entrega información. A partir de este momento, los encuentros serán prácticos y en ellos se desarrollarán ejercicios que persiguen reducir el dolor y tener presente las medidas preventivas para evitar recaídas.

La asistencia a la escuela del hombro se prolonga durante dos meses aproximadamente, en los que los pacientes asisten al hospital y completan los ejercicios en casa (al menos dos veces al día). Además, en las clases prácticas se intentan detectar los problemas potenciales, se repasan los ejercicios aprendidos y se enseñan otros nuevos, así como se reemplazan las bandas (materiales que utilizan los pacientes para realizar los ejercicios) cuando sea preciso.

Calidad de vida

Una vez que concluye la formación, los pacientes ganan en calidad de vida y ya saben qué ejercicios no deben desarrollar, como por ejemplo no trabajar con los brazos por encima de la cabeza o evitar coger más peso del recomendado, y de qué modo pueden reducir su dolor.

Las limitaciones del hombro doloroso repercuten en la actividad básica y diaria de los pacientes debido a la dificultad para la rotación interna y externa de los tendones. Antes de ser derivados al servicio de Rehabilitación, estos enfermos generalmente han recibido tratamiento antiinflamatorio e infiltraciones. 

En la puesta en marcha y desarrollo de esta particular escuela participan los médicos rehabilitadores Pilar Román y Ángela Heredia y la fisioterapeuta Mª Carmen de la Torre. Las sesiones se imparten en una sala de fisioterapia, ubicada en el nivel -1 del Hospital General.

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