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El hospital Reina Sofía atiende en estos momentos a doscientas personas con trastorno del espectro autisma

Especialistas del complejo sanitario y pediatras de Primaria desarrollan un programa de detección precoz que ha detectado 39 casos de autismo en los dos últimos años

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La Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil del Hospital Universitario Reina Sofía atiende en la actualidad a alrededor de doscientos pacientes que presentan trastorno de espectro autista. La delegación de Salud y el complejo sanitario desarrollan un programa que permite el diagnóstico precoz de esta patología a edad temprana.

Esta información ha sido presentada hoy por la delegada provincial de Salud, Mª Isabel Baena, que ha dado a conocer el balance de actividad relacionado con el tratamiento del autismo por parte de la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil (USMIJ) con motivo de la celebración el próximo 2 de abril del Día de Mundial de Concienciación sobre el Autismo.

En 2007 se puso en marcha un plan para la detección rápida de este trastorno en los pequeños con el fin de identificarlo en las primeras etapas en las que se desarrollan en el niño las funciones lingüísticas, cognitivas y sociales que se ven afectadas por el autismo.

La protocolización de la atención de esta enfermedad ha permitido en los dos últimos años la derivación de 53 pacientes infantiles desde su centro de salud hasta la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil (USMI) del complejo sanitario cordobés por sospecha de trastorno autista. Este diagnóstico se confirmó en el 73,58% de los casos, es decir, en 39 niños, y en el resto de los pacientes, aunque se descartó este trastorno, se identificó retraso madurativo o trastorno del lenguaje.

Colaboración con Primaria

Este programa se lleva a cabo conjuntamente entre los profesionales de la USMIJ y pediatras de Atención Primaria de Córdoba y ha posibilitado detectar esta enfermedad durante los dos primeros años y medio de vida del niño, mientras que la media nacional se sitúa en torno a los 6 años.

La denominación de trastornos del espectro autista engloba un conjunto de alteraciones psicopatológicas que afectan a la interacción social, la comunicación verbal y no verbal y los comportamientos del individuo. Estos problemas, que presentan características diferentes según el momento de desarrollo y afectan a una de cada 1.000 personas, son el resultado de alteraciones generalizadas del sistema nervioso central.

La delegada provincial de Salud en Córdoba, María Isabel Baena, destaca “la importancia de esta detección precoz, pues permite que los niños puedan recibir el tratamiento adecuado y la atención específica desde los primeros meses de vida y, en su conjunto, una educación adaptada a sus necesidades”.

Con estos tratamientos, los pequeños experimentan “importantes mejoras en su autonomía, desarrollo del lenguaje y en su calidad de vida cuando reciben atención temprana, así como también contribuye a que los padres y educadores adopten inmediatamente las técnicas más oportunas”, continúa Baena.

Se atendieron a todos los niños con carácter urgente, en un plazo máximo de tres días desde su derivación, y se sometieron a una serie de pruebas psicológicas y exploraciones clínicas para confirmar o descartar el diagnóstico inicial. El programa ha permitido ofrecer una respuesta asistencial rápida y eficaz, reduciendo los tiempos de realización de pruebas y elaboración del diagnóstico definitivo.

Esta iniciativa forma parte de las medidas puestas en marcha por la Consejería de Salud dirigidas a la población infantil para detectar posibles problemas de desarrollo y articular las medidas correspondientes, como ocurre con los programas de detección precoz de la sordera o las alteraciones metabólicas y endocrinas a los recién nacidos. Además, se encuadra en el proceso asistencial de autonomía temprana (Subproceso TEA) dirigido a la infancia con trastornos del desarrollo. 

Guía con asociaciones

Además, desde la Consejería de Salud se ha editado una guía de colaboración con las asociaciones de afectados para fomentar el conocimiento de esta enfermedad y articular el mejor apoyo para los pacientes y su entorno.

El programa de detección temprana incluye el cuestionario M-CHAT, una prueba consensuada internacionalmente para la identificación de posibles casos de autismo que consiste en pasar una encuesta a los padres durante la revisión de los dos años del niño sano y los casos de sospecha se remiten al hospital para su estudio en profundidad.

En el caso del complejo sanitario Reina Sofía, los niños con autismo son atendidos por psicólogos clínicos, psiquiatras, enfermeros y terapeutas ocupacionales en la Unidad de Salud Mental Infanto-Juvenil y en el Hospital de Día de Salud Mental. El responsable de la USMIJ, Vicente Sánchez, también puede remitir a los pacientes a otros servicios hospitalarios con el propósito de descartar otros problemas asociados.

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